Grupo México ganó 15 mil millones de pesos en 2004

Con $20 millones se hubiera evitado la tragedia minera

MARIANA NORANDI

Durante el foro México y el mundo actual, que se lleva a cabo todos los lunes en Casa Lamm, organizado por ese centro cultural y La Jornada, se expuso el tema "El accidente en la mina Pasta de Conchos y las condiciones laborales de los trabajadores en México". En él, la teóloga Cristiana Auerbach presentó los resultados de una investigación que hizo el Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal), en el cual especialistas en seguridad afirman que con 20 millones de pesos Pasta de Conchos podría haber sido una mina segura. Grupo México, al que ésta pertenece, ganó 15 mil millones de pesos en 2004, ubicándose en el sitio 84 de las 500 empresas más importantes del país.

Esa investigación se realizó a petición de mineros de la región, quienes aseguraban que Pasta de Conchos no era una mina segura y estaban molestos porque se manejaba que la explosión, la madrugada del 19 de febrero, había sido un accidente. Los resultados de ese análisis, según la integrante del Cereal, evidencian la situación dramática en que trabajaban los mineros. "No contaban con separadores ni emparrillados que evitaran que la mina se colapsara, utilizaban maquinaria prohibida por peligrosa, no contaban con la guía de vida para salir de la mina en caso de emergencia y la concentración de gas era elevadísima. El gas metano, entre 11 y 12 por ciento, es explosivo. La primera medición que se hizo tras la explosión fue de 54 por ciento. El sistema de ventilación era extremadamente deficiente. Por el tiro de ventilación entraban 160 mil pies cúbicos de aire. De la entrada de la mina a los dos kilómetros y medio donde se encuentran sepultados la mayoría de los mineros entraban 9 mil."

Esa investigación se dio a conocer ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y se presentará junto con la demanda que los familiares interpondrán contra Grupo México, en la que lo acusarán de homicidio por negligencia. "Lo que pasó en Pasta de Conchos no se explica sólo por lo ocurrido aquella madrugada, sino por lo que sucedió los dos años anteriores. En 2004, la Secretaría del Trabajo hizo una inspección y exigió una documentación que Pasta de Conchos nunca presentó. Grupo México reconoció que la explosión fue de 600 grados, pero nosotros sabemos que fue de mil 200. Existe un absoluto desprecio por la vida de los trabajadores y el salario de un minero es de entre 400 y 500 pesos a la semana, es decir, equivalente a 7 por ciento de lo que perciben sus pares en Estados Unidos y Canadá, pese a que el carbón se cotiza en dólares."

A su vez, el especialista en derecho laboral Néstor de Buen, defensor del sindicato minero, ofreció un contexto histórico sobre el sindicalismo mexicano y afirmó que "México se ha acostumbrado a un sindicato corporativista y dependiente del Estado, cuyas leyes laborales son fascistas. Cuando surge un sindicato como el minero, que no está dispuesto a pasar por los cauces de control del Estado, la autoridad busca la manera de eliminarlo por incómodo".

El abogado explicó el proceso de imposición de Elías Morales y la destitución del líder sindical minero Napoleón Gómez Urrutia con un documento presentado ante la Secretaría de Trabajo, supuestamente firmado por tres integrantes del consejo de vigilancia y justicia, en el que se acusaba a Gómez Urrutia, entre otras cosas, de un fraude por 55 millones de dólares. Uno de los supuestos firmantes, Juan Luis Zúñiga, se encontraba en Casa Lamm y declaró que nunca signó ese documento.

Otro de los panelistas fue el también abogado Arturo Alcalde, quien llegó a dos conclusiones: que la situación en Pasta de Conchos no es exclusiva de ellos, sino que esas condiciones laborales se dan en otras ramas de la industria del país, y que el tema de la salud en el trabajo ha sido abandonado. "Hay necesidad de poner en la agenda nacional el tema de la salud, porque nuestras instituciones laborales se han puesto del lado del empresario." Antes estas condiciones en que se encuentra el obrero en México, "surge la necesidad de indemnizar a los deudos para evitar que los hechos de Pasta de Conchos se repitan. Por otro lado, hay que recuperar los cuerpos sepultados; empresarios, gobierno y sindicatos deben asumir su responsabilidad y hay que tomar medidas preventivas".

Finalmente, Luis Javier Garrido solicitó al Cereal que la demanda que prepara no sea sólo contra Grupo México, sino también contra el gobierno.