Jueves 4 de mayo de 2006
Un problema para nuestros intereses, el decreto expropiatorio de Evo Morales, asegura
No habrá represalias de España contra Bolivia, afirma Rodríguez Zapatero
Madrid, 3 de mayo. El presidente del gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció hoy que la nacionalización de los hidrocarburos por Bolivia plantea un problema para los intereses de su país, pero negó que vaya a adoptar represalias ya que "el pueblo boliviano siempre va tener a España a su lado".
Expresó que la decisión tomada por el mandatario Evo Morales el primero de mayo supone un "un problema" para los intereses españoles, pero que esto no será motivo para la ruptura de los acuerdos bilaterales, por lo que no se va a actuar recortando la ayuda económica que Madrid destina al país sudamericano.
Se comprometió a abordar este "conflicto puntual" desde "la política y la diplomacia", y dijo que enviará una "delegación política y técnica" a Bolivia para analizar en el terreno la envergadura de la medida y emprender una negociación con las autoridades bolivianas para paliar los efectos en los "intereses de las empresas españolas".
Rodríguez Zapatero también confirmó que desde el anuncio de la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia ha mantenido conversaciones con sus homólogos de Brasil, Argentina y Venezuela, con quienes ha analizado la situación.
La nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia se ha convertido en el principal asunto de la agenda política y económica de España, para lo que se han movilizado los cuerpos diplomáticos y empresariales para intentar "negociar" una "salida" que no perjudique los intereses económicos de la multinacional Repsol.
El canciller español, Miguel Angel Moratinos, mantuvo este día una conversación telefónica con Evo Morales, a quien expresó su "malestar" por la forma y el fondo de la medida, al considerar que afectará los intereses de las empresas españolas con inversiones en el sector en Bolivia.
El secretario de Asuntos Exteriores, Bernardino León, indicó que "lo que conocemos no pinta bien pero esperamos que el proceso pueda permitir a las empresas mantenerse en Bolivia de manera razonable, con lo que se ha creado cierta confusión".
Mientras, la Unión Europea emitió un nuevo comunicado oficial con respecto al decreto de Morales, en esta ocasión suscrito por el comisario de Energía, Andris Piebalgs, en que reitera la "confianza" en Bolivia para que "garantice una colaboración sostenible con las empresas afectadas mediante un diálogo activo y efectivo".
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