La derecha
La derecha mexicana, subordinada a los intereses económicos y políticos de la alianza Fox-Salinas, en su pretensión de ganar las elecciones presidenciales ha lanzado una ofensiva propagandística de mentiras, injurias y calumnias, sin precedentes en la historia electoral mexicana, que no es contra Andrés Manuel López Obrador, sino contra los mexicanos, y lo único que está logrando es un repudio creciente de sectores cada vez más amplios hacia Fox y Calderón.
1. La desesperación de Felipe Calderón por remontar en las encuestas electorales le ha llevado no nada más a buscar falsificarlas, sino a lanzar una campaña de carácter fascistoide contra el candidato de la coalición Por el Bien de Todos, que ha logrado evidenciar que Calderón no tiene la calidad moral para ocupar el cargo al que aspira, y ni siquiera el de futuro jefe de "la oposición", sobre todo cuando pretende absurdamente alinearse con la política de guerra de George W. Bush.
2. La "guerra sucia" de Fox y Felipillo contra López Obrador en 2006 reproduce los patrones de financiamiento foxista de 2000, evidenciando que con la complicidad del IFE, de la PGR y de la Secretaría de la Función Pública, los panistas y el gobierno de Fox violan las leyes mexicanas al recibir cuantiosos recursos del extranjero provenientes de grupos ultraderechistas y pro fascistas, como la fundación estadunidense Heritage y el Instituto Ludwig von Mises, de Alemania, según documentó Federico Arreola (Milenio Diario, 10/4), todo lo cual está terminando por revertírseles, pues en su pretensión de imponerse están demostrando que ellos son el verdadero peligro para los mexicanos, y que tienen las manos muy sucias para poder hablar en nombre de México.
3. Los analistas han destacado que esta campaña se debe a que la derecha no tiene principios, sino intereses, por lo que Calderón y Fox, individuos sin ética alguna, han urdido en su desesperación una propaganda mentirosa bajo la tesis goebbeliana de que una mentira repetida mil veces algo deja. Todo esto es cierto, pero olvidan que la campaña impuesta por los medios de comunicación encabezados por Televisa, no tiene precedentes y se hace con tono de guerra, no para debatir ideas, sino para exterminar al contendiente con calumnias y mentiras y buscando generar el miedo, por lo que se pretende ubicar en el contexto ideológico de la lucha que los halcones republicanos libran contra quienes se oponen a la expansión de las trasnacionales afines a ellos: presuntos enemigos a los que satanizan e intentan exterminar.
4. Esta derecha mexicana, que encabezan Salinas y Fox -y de la cual Madrazo, los tecnócratas priístas, la Gordillo, Patricia Mercado y Roberto Campa, pretendiendo ser soldados del neoliberalismo, no son más que tristes comparsas-, no representa, al igual que la de los republicanos, intereses nacionales, sino particulares. Fox y Calderón pretenden hablar por México, pero lo hacen en nombre de algunas trasnacionales a las que se hallan vinculados; quieren hablar en nombre de "los empresarios", pero sólo lo hacen por unos cuantos traficantes de influencias enriquecidos con el salinismo y el foxismo.
5. El PAN, uncido ahora a El Yunque y a su línea de confrontación, tiene una historia de intolerancia y violencia verbal. No se olvida que su primer candidato presidencial fue en 1940 el general fascista Juan Andreu Almazán y que durante años los panistas vieron con embeleso como modelo a la España franquista, episodios que sus fundadores, Manuel Gómez Morín y Efraín González Luna, pretendieron minimizar y borrar de la historia oficial de Acción Nacional. El político gallego Manuel Fraga Iribarne, fundador del PP español, acuñó en los 60 el término "la derecha civilizada" para hablar de un posfranquismo fundado en la alternancia, pero la historia española ha demostrado que esta derecha no existe, y ahí están como muestra patética Aznar y Rajoy.
6. La campaña de difamación de corte fascistoide que Felipe Calderón y Manuel Espino desataron contra la escritora Elena Poniatowska, una mexicana de excepción, con la intención de desacreditar la campaña de AMLO, corrobora lo anterior y ha terminado por revertirse contra ellos por su carácter amedrentador, pues revela su ausencia de valores éticos, su machismo y su talante de intolerancia al negar a una intelectual el derecho a manifestar sus preferencias políticas.
7. Calderón se ha exhibido en estos días de desenfreno neofascista como un mentiroso, olvidándose que nada perjudica más a un candidato presidencial que se sepa que es poco confiable. México tuvo ya como gobernante a Vicente Fox, individuo que durante casi seis años mintió sistemáticamente a los mexicanos sobre la realidad del país y sus supuestos logros, dilapidando el presupuesto en autopropaganda mentirosa, y no soportaría seis años más de lo mismo. En la emisión radial de Ciro Gómez Leyva del lunes 10, Calderón se dio a la tarea de calumniar al gobierno venezolano, pretendiendo equiparar a López Obrador con Chávez. De acuerdo con el entrevistador, que llama mentiroso a Calderón, de ocho imputaciones que éste hizo a Chávez por lo menos cinco eran grotescas mentiras, una constituyó una exageración y dos pudieron estar "cerca de la verdad".
8. El escenario es el de una campaña fraudulenta, pues el IFE se niega a callar a Fox sometiéndolo a la ley y a impedir la publicidad panista calumniosa. La decisión del Tribunal Electoral ordenándole al IFE cesar su complicidad con el grupo gobernante y retirar de la circulación el folleto oficial de información que se pretendía enviar a 42 mil mexicanos que votarán en el extranjero conteniendo publicidad calumniosa contra López Obrador, (La Jornada, 13/4) fue incompleta, pues dejó sin sanciones a los mapaches que urdieron esta burda propaganda, atrás de los cuales están Fox y Calderón.
9. El actual es un escenario muy turbio. La pregunta que se escuchó en los noticieros radiales aparece vinculada al proceso electoral: ¿hasta dónde se halla metido el gobierno de Fox en el narcotráfico? El mismo día en que Manuel Espino buscó vincular absurdamente con el PRD a un trabajador del gobierno capitalino arrestado en el aeropuerto por posesión de droga, estalló el nuevo escándalo del gobierno de Fox: dos pilotos, que son altos funcionarios de la Comisión Nacional del Agua, dirigida por Cristóbal Jaime Jaquez, ex compañero de Fox en Coca-Cola y su amigo personal, fueron detenidos en un operativo confuso, y acaso por error, en Ciudad del Carmen con uno de los mayores cargamentos de cocaína de la historia, con valor de 180 millones de dólares.
10. Los extremistas del PAN que quieren seguir disponiendo del país como si fuese un botín están llevando al sistema electoral a la debacle, pero muy difícilmente se saldrán con la suya, pues se han situado contra la razón y el derecho. Y también, a pesar suyo, contra el pueblo de México.