Usted está aquí: sábado 1 de abril de 2006 Capital Está en riesgo el trabajo artesanal, pese a ser una opción de autoempleo

Ante las condiciones adversas, muchos productores emigran o cambian de oficio

Está en riesgo el trabajo artesanal, pese a ser una opción de autoempleo

Representantes de varias delegaciones ofrecen sus artículos en la explanada de B. Juárez

JOSEFINA QUINTERO M.

Ampliar la imagen Elaboración de figuras de vidrio en la feria artesanal instalada en la explanada de la delegación Benito Juárez Foto: Roberto García Ortiz

En la ciudad de México el trabajo de los artesanos tiende a desaparecer, ante la falta de apoyos, el abuso de intermediarios y la comercialización de productos extranjeros, comentaron hombres y mujeres que se resisten a dejar la tradición que heredaron de sus padres.

Oliberto Ortiz, artesano dedicado al grabado prehispánico en bajorrelieve, reconoce que la situación es difícil, y "hay días que ni siquiera hay ventas". Añadió que mucha gente con la que creció ha optado por irse a Estados Unidos, emplearse en alguna empresa o dedicarse a otro oficio que ya no es la artesanía.

Ante la situación, el artesano señala que además de hacer grabados de la cultura mexica, tiene un empleo por las noches en el Instituto Mexicano del Seguro Social, y pese a trabajar jornadas dobles, pues la mayor parte del día la dedica para hacer las imágenes, en ningún momento ha pensado en dejar esta actividad.

Oliberto Ortiz refiere que hace algunos años comercializaba sus artículos por medio de intermediarios, sin embargo sus ganancias disminuyeron, debido a los bajos precios que pagan; "por ejemplo, si una calavera cuesta 150 pesos, me la pagaban en 30 pesos, prácticamente la querían regalada, por ello mejor decidí hacer la venta directa con la gente ".

El costo de los trabajos que realizan los artesanos, explica, se calcula por el material, los diseños y el tiempo de elaboración de cada trabajo, así como su complicación, porque una pieza grabada en piedra puede tardar entre tres y cuatro días en hacerla.

Recuerda a un amigo que se dedicaba a trabajar el cartón; "tenía pedidos de hasta 2 mil pesos, pero en los últimos años la demanda bajó y decidió irse al extranjero".

Desde ayer, artesanos de varias demarcaciones de la ciudad de México participan en la cuarta Feria de la Coordinación Interdelegacional de Promoción del Sur del Distrito Federal (Promosur), que se realiza en la explanada de la delegación Benito Juárez.

Acuden representantes de Iztacalco, Xochimilco, Alvaro Obregón, Tláhuac, Coyoacán, Magdalena Contreras y Milpa Alta, que ofrecen sus productos hasta este domingo.

La subdirectora de Fomento Económico de Iztacalco, María Gilardi, comentó que las ferias de Promosur ayudan a 60 artesanos de la delegación para promover sus productos en toda la ciudad. Además, "las demarcaciones nos organizamos para promover los lugares turísticos".

En Iztacalco, manifestó, el tallado en piedra y el engarzado en tela son artesanías con mucha tradición, y también se trabaja la piel, elaboración de aretes y todo tipo de bisutería. "Lo que queremos es promover nuestra identidad y que la gente tenga la alternativa de conocer lo nuestro; nuestra delegación es de pocos recursos económicos y la artesanía es una alternativa de subsistencia para sus habitantes".

 
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