El fenómeno celeste comenzó al amanecer en Brasil; el día se volvió noche en Natal
Con admiración o temor, millones vieron el eclipse de Sol de ayer
La franja de oscuridad cruzó el Altántico hasta el norte de Africa y el este del Mediterráneo para concluir entre Rusia y Mongolia
Fueron visibles Mercurio y Venus desde una isla griega
Ampliar la imagen Turistas reunidos frente al templo de Apolo, en Antalya, Turquía, para disfrutar del espectáculo celeste Foto: Ap
Natal, Brasil/ Estambul/ Atenas, 29 de marzo. Millones de personas en la mitad del planeta pudieron observar este miércoles el eclipse total o parcial de Sol, que desató un espectro de respuestas: desde temor y admiración hasta sentimientos religiosos.
Este espectáculo de la naturaleza, el cuarto del siglo XXI, comenzó al amanecer en el este de Brasil. La franja de oscuridad cruzó luego el Atlántico hasta el norte de Africa y la zona este del área del mar Mediterráneo. Terminó entre Rusia y Mongolia, con la caída de la noche.
Apenas salió el Sol, el día se convirtió en noche en la ciudad nororiental brasileña de Natal, la capital del estado de Río Grande do Norte -el primer lugar del planeta donde se vio el eclipse-, en el que un grupo de personas se reunió en el Centro de Lanzamiento de cohetes local. El espectáculo, el primero del siglo que se pudo observar en Brasil, generó gritos de sorpresa y encantamiento de la multitud.
Las nubes que cubrieron parcialmente el cielo de la ciudad no llegaron a perjudicar demasiado la visibilidad del eclipse.
Al contrario, "ayudaron a la gente que intentaba observar sin gafas de protección", según el científico Antonio Araújo, uno de los expertos que acudieron a Natal para registrar el fenómeno.
En el vecino estado de Pernambuco, unas 300 personas se concentraron cerca de la Catedral de la ciudad histórica de Olinda para ver un eclipse casi total de Sol, ya que allí sólo 96 por ciento de la circunferencia del astro desapareció bajo la sombra de la Luna.
También en el estado de Alagoas cientos de personas se reunieron en la playa de Ponta Verde en la capital, Maceió, para seguir el fenómeno al lado de expertos del Centro de Estudios Astronómicos (CEAAL) local.
Según los astrónomos, los brasileños que se perdieron el eclipse hoy tendrán la oportunidad de ver otro en 2045.
El buen tiempo fue favorecedor
El eclipse total de Sol fue seguido por miles de observadores en Africa y el área del mar Mediterráneo, donde el buen tiempo permitió apreciar claramente cómo la Luna cubrió por completo por unos minutos al astro rey.
En la pequeña isla griega Kastellorizon, que sólo tiene 250 habitantes, se reunieron unos 3 mil visitantes, que colmaron la pintoresca zona portuaria.
"Es uno de los fenómenos de la naturaleza más espectaculares. Aquí el eclipse total duró unos 2.5 minutos", dijo el astrofísico griego Ioannis Seiradakis en la televisión local.
La isla de nueve kilómetros cuadrados frente a la costa de Turquía fue el único territorio de la Unión Europea donde se pudo observar el eclipse total de Sol, ya que en el resto del continente el fenómeno fue sólo parcial.
"Nunca habían venido tantas personas a nuestra isla", dijo una habitante.
Durante el eclipse se pudieron observar los planetas Mercurio y Venus, así como numerosas estrellas, mientras la temperatura bajó cinco grados centígrados. Muchas aves suspendieron su actividad y se posaron sobre los árboles. Además, animales domésticos, como perros y gatos, presentaron conductas inusuales, según relataron testigos.
También para las personas el eclipse representó una experiencia novedosa: "A pesar de que sabemos todo sobre el fenómeno, se siente cierto temor. De alguna manera es algo fantasmal", señaló una estudiante de astrofísica en la radio griega.
La franja de oscuridad cruzó luego sobre Turquía. En el antiguo templo de Apolo en Side, seguidores de numerosos países estallaron en júbilo cuando el Sol se oscureció, mientras sonaba música de concierto.
Causa de algunos miedos
Pero el espectáculo celeste también causó miedos: los científicos de Turquía reiteraron que no era un signo que anunciara un terremoto. En 1999, por casualidad, una semana después de un eclipse de Sol ocurrió un sismo en este país, que dejó más de 18 mil muertos.
También en el sur de Rusia y Siberia, miles de personas se volcaron a las calles para admirar el eclipse.
En tanto, en Nigeria, los musulmanes saludaron en la mañana el inicio del eclipse con un fuerte "Dios es grande". Muchos nigerianos calificaron el fenómeno de la naturaleza de "signo de Dios", y algunos huyeron de sus casas por temor.
Un clérigo musulmán, Abu Thanni, dijo que el eclipse era la forma en que Alá muestra que es omnipotente, mientras un pastor cristiano, Joseph Aku, citó la Biblia para respaldar su visión de que el eclipse es un acto divino.
"¿Por qué se puede ver en Nigeria si no es un castigo por nuestros pecados?", se preguntó Musa Abubakar de Kaduna. En 1989, durante un eclipse de Sol en este país africano ocurrieron disturbios de musulmanes fanáticos, que incendiaron varias iglesias. En los incidentes perdieron la vida 28 personas.
También en Ghana el Sol se oscureció durante unos minutos. Algunos comerciantes intentaron hacer negocio con la venta de anteojos especiales, cuyo precio se duplicó poco antes del eclipse.
Hace casi seis meses, el 3 de octubre de 2005, hubo un eclipse parcial de Sol en Europa y el próximo eclipse total será el primero de agosto de 2008, que se verá en Siberia, entre otras regiones.