En San Cristóbal, 17 ataques de noviembre a la fecha
Embestida contra otros dos activistas de la otra
San Cristobal de las Casas, Chis., 16 de marzo. Sujetos no identificados allanaron el domicilio de la directora de la organización católica Cáritas en esta ciudad, Norma Medina, y de su esposo, David Méndez, colaborador del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, denunció este organismo. Con ése suman 17 los hechos de violencia y hostigamiento ocurridos de noviembre a la fecha contra activistas que residen en San Cristóbal y participan en la otra campaña, convocada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
El centro, que preside el obispo emérito Samuel Ruiz García, explicó en un comunicado de prensa que el pasado martes, "entre las nueve y las 11 de la mañana, desconocidos irrumpieron en la casa de David Méndez y Norma Medina, destruyeron las cerraduras y las puertas de acceso a la vivienda de la que sustrajeron únicamente una computadora portátil, abandonando otros objetos de valor; hurgaron sus pertenencias personales y las de sus pequeños hijos, dejándolas esparcidas sobre las camas".
Medina es directora de Cáritas, agrupación perteneciente a la diócesis de San Cristóbal, y en esa calidad en meses recientes "ha trabajado intensamente en la atención humanitaria a las personas y poblaciones damnificadas por el paso del ciclón Stan, así como en la denuncia pública de las irregularidades de la gestión de las autoridades estatales para atender esa emergencia", manifestó el centro.
Méndez es colaborador del Fray Bartolomé desde hace seis años, y recientemente "sus esfuerzos se concentraron en la organización del primer Encuentro Estatal contra Procede/Procecom, que se realizó del 10 al 12 de marzo en Petalcingo, Tila".
Recordó que el día que se inició dicho encuentro "fue ubicado un retén militar, donde nunca se había situado antes: en la entrada del ejido Petalcingo, donde David y los demás participantes fueron fotografiados por los soldados".
Además, ocurrieron incidentes como "la interrupción en el servicio eléctrico y se identificó al menos a tres personas como miembros del Ejército destacados en Tila, quienes se infiltraron en el acto vestidos de civil y estuvieron tomando fotografías y video a los participantes".
El allanamiento fue denunciado ante el Ministerio Público el mismo día que sucedió, pero todos los ataques ocurridos antes se han reportado a las autoridades correspondientes, sin que hasta la fecha se tenga información oficial de las investigaciones o medidas tomadas para dar con los responsables y evitar que continúen.
"Estos hechos de hostigamiento e intimidación se inscriben en un contexto de incremento de la polarización y conflictividad social en el estado, en el marco político electoral y de la otra campaña, al parecer con la intención de generar confusión y miedo en la población e inhibir la propia tarea de promoción y defensa de los derechos humanos en el estado."