Usted está aquí: viernes 10 de marzo de 2006 Política Cassez denuncia vejaciones de funcionarios de la AFI y la SIEDO

La francesa y su novio insisten en su inocencia

Cassez denuncia vejaciones de funcionarios de la AFI y la SIEDO

ALFREDO MENDEZ

Ampliar la imagen La francesa Florence Cassez durante la audiencia de ayer Foto: Alfredo Domínguez

La primera audiencia judicial se prolongó por más de siete horas, y lo único claro para la ciudadana francesa Marie Florence Cassez, de 31 años de edad, acusada de secuestro y portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército, fue el brillo de sus ojos verdes.

Notablemente nerviosa, y en no pocos momentos desesperada por sus problemas de comunicación, aseguró a la autoridad judicial que es inocente de todos los cargos y que su pareja sentimental, Israel Vallarta, presunto integrante de la banda de secuestradores Los Zodiaco, nunca le dijo que estaba involucrado con actividades de la delincuencia organizada y que lo investigaba la policía.

Frente a sus abogados, agentes del Ministerio Público Federal, representantes de los medios de comunicación y un secretario de acuerdos que encabezó la diligencia, Cassez intentó deslindarse de sus acusadores. Tras la rejilla de prácticas se dijo víctima de actos de violencia, vejaciones y presiones de parte de funcionarios de la Agencia Federal de Investigación (AFI) y de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la Procuraduría General de la República (PGR).

La francesa y Vallarta deberán comprobar a más tardar el próximo sábado que son falsas las imputaciones que presentaron en su contra varias personas, quienes los señalan como plagiarios.

Ayer, tras una larga audiencia efectuada en el juzgado quinto de distrito del Reclusorio Oriente, los inculpados aseguraron hasta el cansancio, como si narraran un guión cinematográfico, que fueron violados sus derechos humanos, y que la PGR les "inventó" cargos para proteger a los "verdaderos miembros de la banda delictiva".

Israel Vallarta, después de escuchar la declaración que rindió ante el Ministerio Público, el pasado 8 de diciembre, después de su detención, y en la que reconocía haber participado al menos en seis secuestros, acaparó la atención de quienes atestiguaban la diligencia: "no ratifico esos dichos, quiero cambiar mi declaración".

El inculpado ocupó dos horas para exponer los motivos por los cuales, según el, se encuentra preso. Aseguró que el verdadero culpable de la situación en la que encuentra es el empresario judío Eduardo Margocel Sogol, quien lo involucró en actividades ilícitas.

Explicó que tras sostener una relación sentimental con el empresario se fue dando cuenta que sus actividades económicas dependían de encabezar una banda de secuestradores.

Cuatro testimonios de personas que fueron secuestradas aseguran que Israel y Florence se encargaban de vigilarlos en una casa de seguridad ubicada en la carretera federal a Cuernavaca.

Confirman montaje televisivo de la AFI

Tras declararse inocentes, la ciudadana francesa y su novio confirmaron que su detención se dio un día antes de que se hiciera público el operativo de elementos de la AFI, en el que se mostró la liberación de varios secuestrados.

Bajo protesta de decir verdad, Vallarta y Cassez precisaron que el 8 de diciembre del año pasado fueron detenidos cerca del rancho Las Chinitas, que era utilizado por la banda de secuestradores Los Zodiaco para resguardar a las personas plagiadas.

Con exceso de violencia, según narraron a la autoridad judicial, fueron trasladados a las instalaciones de la SIEDO, y bajo amenazas se les obligó aceptar los cargos.

La madrugada del siguiente día, los agentes federales los trasladaron al rancho Las Chinitas -donde vivía Vallarta desde hace nueve años- para presentarlos a los medios de comunicación. "Nos advirtieron que teníamos que decir a los reporteros que éramos culpables o nos iría muy mal, pero los hechos fueron el día anterior", puntualizó.

Con inmensos problemas para comunicarse, lo que obligó a la juez Sánchez Contreras a pedir un perito traductor de la PGR, Florence Cassez también denunció haber recibido malos tratos de los agentes de la AFI, "quienes nunca dejaron de manosearme y golpearme en la cabeza".

 
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