Funcionaria de UNESCO insta a sostener políticas de largo plazo para el sector
"Escuelas de mercado" han producido más discriminación y rezago educativo
Las escuelas de mercado han producido mayor discriminación, rezago y segregación de planteles para ricos, pobres y de clase media, alertó la directora de Educación para América Latina y el Caribe de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), Ana Luiza Machado, al afirmar que "sin duda" los gobiernos con preocupación social y democracia "van a ser mejores en educación" porque centran su atención en los problemas de la colectividad.
No obstante, consideró que la tendencia de los gobiernos -sean de derecha o de izquierda- no es lo más importante, sino sostener una política educativa de largo plazo. Otro tema fundamental es el financiamiento, pues de ahora a 2015 se requieren en Latinoamérica 150 mil millones de dólares adicionales para cumplir con las Metas del Milenio de dar educación a todos.
Entrevistada en el contexto de la sexta reunión ministerial del grupo de las nueve naciones más pobladas del mundo, que impulsan el proyecto Educación para Todos, señaló que la UNESCO ha observado que en el discurso todos los gobiernos reconocen la importancia de la educación, pero "del dicho al hecho hay mucho trecho" y la realidad es que hay naciones que realmente están en condiciones de aumentar sus presupuestos para el sector.
Por otra parte, añadió, los gobiernos deben hacerse cargo también de los "malos resultados", porque luego ocurre que nadie se siente responsable y se echan la culpa unos a otros".
Advirtió que en muchos países de la zona las políticas educativas no han repercutido en el salón de clases y, en el mejor de los casos, se desarrolló la infraestructura. "Lo cierto es que la evaluación no ha servido como debería para elevar la calidad."
La evaluación, añadió, ha tenido un problema muy serio: no considerar el nivel socioeconómico de los niños. Se califica como si todos estuvieran en las mismas condiciones, lo que ha ocasionado que en algunas escuelas no se acepte a cualquier alumno porque bajaría el puntaje del plantel en las evaluaciones.
En este contexto, afirmó: "las escuelas de mercado terminan siendo más discriminadoras", pues incentivan la segregación de los planteles para "ricos, pobres y de clase media", como muestran los resultados del Laboratorio Latinoamericano de Medición de la Calidad de la UNESCO.
Sobre el viraje hacia regímenes izquierdistas en algunos países de América Latina, manifestó que "si el gobierno tiene una tendencia de derecha o de izquierda, eso no es lo que más impacta a la educación", sino el cambio constante de los titulares del sector. Así, en Centroamérica, el tiempo promedio que dura un ministro de Educación es año y medio.
Por ello, destacó la necesidad de tener proyectos de largo plazo, y reconoció que, "sin duda, los gobiernos con preocupación social van a ser mejores en educación".
Por otro lado, enfatizó que sin solidaridad internacional, algunos países de esta zona -como los centroamericanos- no podrán cumplir las Metas del Milenio de garantizar que antes de 2015 todos los niños tengan acceso a primaria y aumentar 50 por ciento el número de alfabetizados.
Si los gobiernos latinoamericanos quieren cumplir con las metas mencionadas deben poner énfasis en los contenidos de la educación; prestar mayor atención al docente, no sólo en cuanto a su formación, sino en sus condiciones de trabajo; fortalecer la cultura de la escuela para favorecer el aprendizaje y la participación de las comunidades; dar más apertura y flexibilidad en la gestión de la educación y fortalecer el compromiso social en el rubro, porque directores, profesores y ministros se "echan la culpa unos a otros" y nadie se hace responsable, señaló.