Funcionario de la ONU comenta el caso de México
Una vergüenza, la prescripción de delitos de lesa humanidad
Jalapa, Ver., 4 de marzo. La decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre la prescripción de los delitos derivados de las matanzas estudiantiles en 1968 y 1971 es "una vergüenza" para México, afirmó Santiago Corcuera Cabezut, miembro del Grupo de Trabajo de la Organización de las Naciones Unidas sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias.
No podrá haber una reconciliación con el pasado reciente hasta que no se esclarezcan los crímenes ocurridos durante la década de los 60 y 70, agregó.
Tras una visita efectuada a la Universidad Veracruzana, el experto destacó la preocupación que tiene la ONU sobre la posición adoptada por algunas naciones, sobre todo de sus sistemas judiciales y legales, de establecer la prescriptibilidad de los crímenes contra la humanidad.
Uno de estos países, indicó, es México, con los casos de genocidio ocurridos en las décadas pasadas.
"Sabemos cuál fue el resultado en México sobre la sentencia de prescriptibilidad del crimen de genocidio, que es una vergüenza que se diga que por el 14 constitucional el homicidio prescribe. Eso nos debería dar vergüenza. Entonces, si la culpa es del 14 constitucional, cambiémoslo, si ese es el pretexto", enfatizó.
La Organización de las Naciones Unidas, destacó, tiene facultades para emitir recomendaciones a los países sobre el tema, y aseguró que ya lo ha hecho en el caso de México, a cuyo gobierno se pidió revisar la situación que guarda el orden jurídico en determinadas materias.
"Si éste no se ajusta a los estándares internacionales, lo que se recomienda es que se armonice el orden jurídico", propuso.
Corcuera Cabezut expuso que en México hace falta la creación de una comisión de la verdad, paralela a la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado, como han hecho países de Sudamérica y que han dado resultados exitosos en el esclarecimiento de los crímenes de lesa humanidad.
"No se trata de esculcar y hurgar en el pasado, para reabrir las llagas, se trata de entender el pasado, para que cicatricen esas llagas", subrayó.
Juzgó como insoslayable que en México los autores de genocidio y crímenes políticos sean presentados ante los tribunales y se les castigue conforme a la ley.
Citó el caso de España, donde se creyó que los crímenes cometidos durante la era de la dictadura de Francisco Franco ya habían quedado en el olvido, sin embargo, ya existe un decreto real donde se reabren los expedientes, ante una nueva demanda de la sociedad.
"La investigación y el castigo para estos crímenes nunca deben acabarse", finalizó.