"Creo que los mexiquenses quieren que regrese Montiel, pero lo que se llevó", señala
Calderón pide a sus colaboradores evitar "trucos" y rifas de televisores
Ampliar la imagen Felipe Calderón durante una reunión efectuada en la región del valle de Toluca Foto: Agencia MVT
Metepec, Edomex, 4 de marzo. Antes de despedirse de cientos de candidatos locales e integrantes de la estructura mexiquense del PAN, el abanderado presidencial Felipe Calderón les pidió: "Oigan, nada de teles que se rifen ni nada de trucos. Que haya gente limpia y que vaya por convicción" a los mítines.
Con ello intentó atajar las críticas que suscitó la rifa de televisiones y la asistencia de una coordinadora del programa Oportunidades al mitin del viernes en el pueblo de San Pablo de las Salinas, en Tultepec.
A ocho días de las elecciones locales, el michoacano admitió que su partido fue derrotado por el PRI en las elecciones para gobernador porque cometió errores, pero aseguró que estos comicios representan la revancha.
En la tierra del ex gobernador Arturo Montiel acusó al priísta de buscar regresar al poder por medio de sus familiares (concretamente su sobrina Carolina Monroy del Mazo contiende por la alcaldía de Metepec), e hizo humor con esa referencia: "Yo creo que los mexiquenses quieren que regrese Montiel, pero que regrese lo que se llevó en la gubernatura del estado de México".
En Sultepec, donde nunca ha ganado otro partido más que el PRI, pidió a los habitantes que se liberen del "engaño, de la burla que siempre han padecido", y puso en duda que el gobernador Enrique Peña Nieto cumpla su promesa de construir una universidad.
Después de tener actividades poco concurridas en el estado de México, con problemas de organización y las rifas, el panista tuvo un mejor día. Sin embargo, canceló un mitin en Ecatepec -ahí estuvo Andrés Manuel López Obrador- y de última hora lo sustituyó por otro en San Martín de las Pirámides, donde la plaza Torrente de Piedras Negras se llenó a la mitad.
Sabedor de que el PAN mexiquense está dividido, les pidió que sin importar el resultado de la eleccion del día 12, trabajen en favor de su candidatura. "Ya Dios los premiará con la victoria".
En Sultepec, Calderón tuvo una cálida recepción, ya que cientos de habitantes se congregaron en la plaza principal.
A su llegada, mujeres y niñas vestidas de blanco colgaron al candidato y a su hija María collares de flores como las que ponen en las imágenes religiosas en Semana Santa.
Al principio del mitin, los panistas se quejaron de que los priístas intentaron boicotear el acto diciéndole a la gente que la reunión se iba a realizar a otra hora y en otro lugar.
En este municipio, colindante con el estado de Guerrero y donde al cerrarse las minas de plata sus habitantes engrosaron las filas de la migración a Estados Unidos, Calderón declaró que se sentía como en casa, y más con los sombreros "calentanos", como los de la Tierra Caliente de Michoacán.
Fue cuando llamó a los habitantes de Sultepec a liberarse del engaño, de la burla que siempre han padecido. "Eso de que vino el gobernador (Enrique Peña Nieto) y que firmó que iba a hacer una universidad y quién sabe cuánta cosa, lo único que demuestra es la capacidad de perversión del PRI en el estado de México".
Se preguntó cuántos años lleva el PRI en Sultepec prometiendo lo mismo sin cumplirlo, y logró capturar la atención de cientos de campesinos cuando contó la anécdota de un ranchero al que siempre engañaban cuando compraba una vaca improductiva.
"Nos pueden engañar tres veces, tres años y durante 70 años; el problema no es el que vende la vaca, sino el que la sigue comprando. Así que no le busquen", afirmó.
Hizo una pausa y recordó a los 65 mineros que murieron durante una explosión en Pasta de Conchos, en Coahuila, para decir que "Dios los tenga en su gloria".
Otra vez comparó a su contrincante de la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, con Arturo Montiel, al decir que en vez de gastar dinero en plantas de tratamiento lo destinaron a sus campañas políticas por la Presidencia de la República.
Frente a una población dividida por la migración, prometió que impulsará la inversión y el empleo, para evitar que los mexicanos sigan "brincando" el muro de Estados Unidos.
Al final, los asistentes fueron invitados a una comida en el centro deportivo.
"Te queremos en Almoloya"
Un encuentro en Metepec con candidatos a presidentes municipales y a diputados locales hizo recordar a Calderón los días de la contienda interna en que era apapachado por la militancia panista.
Después de los errores cometidos con la rifa de televisiones y el uso de Oportunidades, su coordinador de campaña en el estado de México, Ulises Ramírez, le preparó un convivio muy animado. Los panistas hacían fila para tomarse fotos con él, le echaban porras, lo invitaban a los cierres de campaña de sus municipios.
Entusiasmado, Calderón respondió: "no me tienen que torcer la manita".
Para reforzar su lema de campaña: "Por un México con manos limpias", insistió en que no tiene nada que ocultar: "a mí no me van a encontrar ni castillitos en Francia ni casitas en Madrid, ni en Acapulco ni en Miami, ni en Valle de Bravo. Hay mucha diferencia entre el PRI y el PAN".
Alguien lo invitó al municipio de Almoloya de Juárez: "Te queremos en Alomoloya", y respondió que los del PRI deberían estar ahí, refiriéndose al penal de máxima seguridad ubicado en ese lugar.
Indicó que el estado de México es el más importante por su tamaño, población y peso político. "No los voy a dejar; no me dejen en esto solo".
En este municipio gobernado por el PRI, Calderón dio tímida respuesta a las críticas de Madrazo y se burló de las ligas entre la M de Madrazo y la M de Mario Marín, el góber precioso de Puebla.