Intenta imponer a directivos, denuncian trabajadores
Acusan a la Ssa de querer dar albazo en el Juárez
La dependencia pretende desactivar la movilización contra el cierre del nosocomio; las protestas continuarán, advierten
Ampliar la imagen Foto: MARIA LUISA SEVERIANO
Trabajadores del hospital Juárez del Centro denunciaron que el jueves autoridades de la Secretaría de Salud (Ssa) intentaron conformar un nuevo equipo directivo para el nosocomio, el cual sería encabezado por Alfonso Trujillo Plaisant, de la Dirección General de Coordinación y Desarrollo de Hospitales Federales.
''No se los permitimos, porque es un intento más para desalojarnos y cerrarnos completamente; es lo último que les hace falta: apoderarse administrativamente del hospital", dijo Edgardo Huertas Neri, representante de los trabajadores.
En marzo de 2005 los empleados del hospital fueron notificados por las autoridades sanitarias de que su centro de trabajo sería cerrado, porque el terreno donde se ubica se cedería a la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Meses después Julio Frenk, titular de la dependencia, indicó que en ese predio se construiría un centro de atención a consulta externa.
Los trabajadores del nosocomio denunciaron que habían acordado con la Ssa proponer una terna de la cual saldrían las nuevas autoridades del hospital, y que una vez constituido ese grupo y avalado por los autoridades, se realizarían "acciones de rehabilitación", así como el abastecimiento de insumos.
Sin embargo, Huertas Neri expuso que en el documento donde Trujillo Plaisant se compromete a cumplir con esos puntos, su firma no coincide con la que ha plasmado en diversas minutas de la Ssa.
''Es gente corrupta. Creen que somos tontos y no se vale que hagan esto, porque se están burlando, no sólo de nosotros, sino también de todo el país."
A nombre de los trabajadores del Juárez del Centro, confirmó que continuarán en su lucha para que el hospital no sea cerrado. El portavoz afirmó que las autoridades sanitarias pretenden realizar el cierre el 1º de marzo próximo.
''Vamos a salir a la calle a defender el derecho de la gente, porque el hospital Juárez no es sólo un conflicto laboral, es un problema de salud para el pueblo (...) Llegaremos a esa fecha trabajando y luchando. La gente está aquí, en plantones permanentes. Se están quedando para defender su hospital.''
El sanatorio, subrayó, brinda atención médica a personas que no cuentan con seguridad social, como prostitutas, ambulantes, ancianos, integrantes de diversos asilos y niños de la calle, entre otros.
En conferencia de prensa, Huertas Neri aclaró que una de las principales razones que la administración federal ha esgrimido para el cierre del sanatorio es que las instalaciones se encuentran en malas condiciones después del terremoto de 1985, a lo que acotó: ''Tenemos 20 años trabajando así y nadie se había preocupado por nosotros. Casualmente esto se da en el último año del periodo de (Vicente) Fox".
La base laboral, aclaró, ha sido perjudicada, ya que, de 450 trabajadores, entre médicos, enfermeras y administrativos, ahora sólo quedan 250.
Refutó lo dicho por Julio Frenk el 26 de noviembre pasado, en torno a que el servicio del hospital es bajo porque cada médico brindaba en promedio 2.8 consultas diarias; desde hace tiempo, acotó, "damos 60 mil consultas anuales, a pesar de que nos han disminuido medicamentos, equipo médico y reactivos".
Por su parte, el ex boxeador Rubén Púas Olivares, presidente de la fundación que lleva su nombre y que apoya a los trabajadores del hospital, indicó que lo que la sociedad necesita es salud, y propuso que, en lugar de cerrarlo, las autoridades sanitarias deberían considerar la remodelación del nosocomio para que continúe su labor.