Simpatizantes toman las calles de Puerto Príncipe para celebrar con música y baile

Declaran a René Preval triunfador de la elección presidencial en Haití

Autoridades modifican el recuento de votos; "fue una vía razonable", sostiene Kofi Annan

Felicitaciones al mandatario electo de EU y países de AL al desaparecer el clima de tensión

AFP, DPA Y REUTERS

Puerto Principe, 16 de febrero. El ex presidente René Preval fue declarado este jueves ganador de las elecciones presidenciales del 7 de febrero en Haití, luego que las autoridades locales modificaron el sistema de recuento de los votos en blanco y contaron con el respaldo de la comunidad internacional.

De inmediato los haitianos tomaron masivamente las calles de Puerto Príncipe, después de cinco días consecutivos de protestas, pero esta vez lo hicieron bailando al ritmo de tambores y rudimentarias trompetas para celebrar la victoria de Preval, de 63 años, un hombre en el pasado cercano al ex presidente Jean Bertrand Aristide.

De esta manera, se puso fin a un creciente clima de tensión y denuncias de "fraude masivo", que amenazaba con un conflicto mayor. En consecuencia, las felicitaciones al mandatario electo y el pueblo haitiano no se hicieron esperar, tanto de Estados Unidos y países de América Latina como de Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA).

"René García Preval obtuvo 51.15 por ciento de los votos, basado en el escrutinio de 98 por ciento de los centros de votación, y es declarado ganador", dijo Max Mathurin, quien encabeza el Consejo Electoral Provisional.

El resultado, que contrasta con el anterior escrutinio parcial que dejaba a Preval con una mayoría insuficiente de 48.76 por ciento para ganar en primera vuelta, se alcanzó luego de aprobar cambios de último minuto en la forma de contabilizar los votos en blanco, precisó Mathurin a la prensa.

Intensa actividad diplomática

El método consistió en que los votos en blanco fueron distribuidos en forma proporcional entre los 32 candidatos presidenciales, tras una intensa actividad diplomática encabezada por Brasil y la OEA. Al respecto, ocho de los nueve miembros del Consejo Electoral suscribieron la proclama de victoria de Preval.

Ese acuerdo de prorratear los votos en blanco, que recibió elogios de la comunidad latinoamericana, fue rechazado en cambio por Leslie Manigat, el candidato que se ubicó en el segundo lugar en los comicios con un lejano 11.83 por ciento de los votos, al denunciar que se trató de "la imposición de una victoria".

El secretario general de la ONU, Kofi Annan, dijo que este cambio en el recuento fue una "vía razonable" para superar las controversias de fraude electoral, que podrían derivar en violencia dadas las circunstancias" ante un "impasse que podría haber conducido a conflictos graves y violencia".

El canciller brasileño, Celso Amorim, dijo que su país, que participó como "facilitador" en las negociaciones sobre Haití, tiene "indicaciones muy positivas sobre Preval" y sobre su disposición a establecer "un diálogo con las diversas fuerzas políticas". Brasil, además, encabeza los cascos azules de 9 mil 500 efectivos militares y policiales.

Chile, que mantiene 600 cascos azules en la misión de la ONU en Haití, también saludó este jueves la elección de Preval. El presidente Ricardo Lagos le deseó "el mejor de los éxitos" y destacó el esfuerzo de la ONU para normalizar la vida institucional de ese país.

República Dominicana, que comparte la isla Española con Haití, también felicitó la declaración de Preval como presidente electo. En el mismo tenor de satisfacción se manifestó Cuba, que días antes había denunciado una presunta intervención de Estados Unidos para impedir el triunfo de Preval.

Con el triunfo electoral de René Preval, Haití ahora va a requerir de mucha cooperación internacional, "menos tropas y más maestros, más médicos, más enfermeras, más asesores que ayuden a la agricultura, a la economía. Es un país que se lo ha ganado", declaró el presidente del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón.

Estados Unidos, que incluso recibió la víspera críticas de la congresista Maxine Walters de que había intentado un "vergonzoso y obvio intento de robar las elecciones" del ganador haitiano, celebró también la victoria de Preval en un mensaje de felicitación y se declaró listo para "trabajar con el nuevo gobierno, ayudar al pueblo haitiano y construir un futuro mejor", de acuerdo con el vocero del Departamento de Estado, Tom Casey.

El secretario general de la OEA, el chileno José Miguel Insulza, se sumó a la decisión de proclamar a Preval como ganador de los controvertidos comicios haitianos. Es "un paso importante en la dirección a construir democracia a futuro en este país", señaló. Preval, quien ya gobernó un periodo completo entre 1996 y 2001, es visto como el "campeón de los pobres" al igual que su ex aliado Jean Bertrand Aristide, bajo cuyo gobierno fue primer ministro. Pero sus adversarios no querían que ganara, pues temen que pueda hacer regresar desde el exilio a Aristide.

Ex líder del partido Familia Lavalas de Aristide, Preval es considerado de izquierda y se presentó como candidato del pequeño partido L'Espwa (Esperanza), decisión que pudo haberle ayudado a ensanchar su base de apoyo popular. Además, sus allegados insisten en que ahora no ha tenido ningún contacto con Aristide.

Restablecer la paz, primer reto

Tras su triunfo en las urnas, el principal reto de este agrónomo parece ser restablecer la paz y la concordia entre los haitianos. Está en favor del retiro lo más pronto posible de las fuerzas internacionales de paz, una vez que la situación interna se normalice.

Durante su campaña prometió crear empleos, mejorar la educación y combatir las desigualdades sociales en Haití, la más pobre y una de las más violentas naciones del hemisferio occidental, con 8.5 millones de habitantes. Es elogiado por algunos como un administrador serio y honesto, que supo trabajar en su anterior mandato.