Desde 1997 la casa de estudios dejó de pagar al instituto cuotas por retiro voluntario
Pretende la Universidad Autónoma de Querétaro modificar convenio con IMSS por adeudo millonario
Querétaro, Qro., 13 de febrero. La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) pretende modificar el convenio que tiene con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el rubro de retiro, cesantía en edad avanzada y vejez, a fin de solucionar el problema de adeudo que tiene con sus trabajadores por 249 millones de pesos.
El delegado del IMSS en la entidad, Salvador Rochín Camarena, explicó que la casa de estudios de Querétaro y la institución médica firmaron en 1973 un convenio de afiliación voluntaria, para que los empleados de esa universidad tuvieran el beneficio.
Sin embargo, desde 1997 la casa de estudios dejó de pagar esas cuotas, lo que generó una deuda de 249 millones 915 mil 873 pesos, de los cuales 123 millones corresponden a pasivos y el resto es de multas y recargos.
Rochín Camarena señaló que en conversaciones con el rector de la institución, Raúl Iturralde, ha manifestado que su régimen de pensiones y jubilaciones da un beneficio mayor al previsto en la ley, además de que el convenio de afiliación no es obligatorio por lo que podría revisarse en el rubro de retiro.
Dijo que es necesario que la UAQ modifique el acuerdo que tiene signado con el IMSS, pues de no depositar la cantidad correspondiente del adeudo, más tarde será "inmanejable".
El funcionario aclaró que la casa de estudios queretana no tiene ningún endeudamiento en el rubro de enfermedad y maternidad, así como en el de invalidez desde 2002, año en que el gobierno del estado saldó el pasivo que tenía la UAQ con la institución médica en el último rango, y aseguró que no se suspenderá el servicio médico a los trabajadores por el adeudo que tiene esa institución educativa, pues lo que se debe no es directamente con el Seguro Social, sino con los empleados universitarios.
El artículo 169 de la Ley General del IMSS establece que los recursos por concepto de retiro, cesantía y vejez son propiedad de los trabajadores, por lo que ese instituto lo recauda y lo abona a las cuotas de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore) de los empleados.
La UAQ tendrá que discutir con los sindicatos de Personal Académico (Supauaq) y de Trabajadores (Steuaq) de esa casa de estudios, la solución del problema que afecta el ahorro de los trabajadores universitarios de esa universidad.