Perdimos, pero no nos superaron, dejamos ir siete oportunidades de gol, dijo Américo Gallego
Gabriel Pereyra marcó diferencia y Cruz Azul quitó lo invicto al Toluca
La Máquina superó 2-1 a los mexiquenses; el primer gol de los azules fue obra del Kikín
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Pereyra y Kikín festejaron en el estadio Azul con el estilo del pancracio
Foto: Reuters
Gabriel Pereyra ingresó de relevo al 55 y durante 16 minutos pasó de noche, totalmente desapercibido, hasta que apareció con un golazo que dio al Cruz Azul su primer triunfo del torneo, 2-1 sobre el campeón Toluca que vio rota su marcha perfecta de tres victorias al hilo.
El argentino, sin mucho ángulo de disparo, conectó de bolea un centro de Alberto Rodríguez y mandó el esférico al ángulo superior derecho del portero César Lozano. El festejo fue al estilo de la lucha libre: con una máscara que les regaló un aficionado en Guadalajara y ya no la del Místico.
Pereyra, quien había ingresado bajo una cálida ovación, tuvo lo que le faltó al Toluca: el gol.
Y es que el actual monarca falló las oportunidades más claras, mientras el portero Emmanuel González se convirtió en uno de los elementos más importantes de su equipo.
"Sabemos de la calidad de Pereyra", coincidieron casualmente los técnicos de ambos equipos. Y el pampero confirmó los expectativas aunque durante la semana padeció gripe y estuvo dos días en cama. "Con muchas pastillas me recuperé... tendré que enfermarme siempre", dijo un radiante Gabriel, quien aclaró que el triunfo de esta tarde no es una revancha del torneo anterior, ya que la eliminación en la liguilla "nos dolió muchísimo".
Parecía que los Diablos Rojos tenían tomada la medida a los Cementeros, ya que desde el primer minuto crearon peligro en la meta local y después el uruguayo Vicente Sánchez entregó el balón a un solitario Emmanuel.
Cruz Azul sólo respondió con tiro al poste de Tomás Campos, pero la visita logró el 1-0 al minuto 26. Fue en un error de Gerardo Torrado, quien no pudo despejar y dio paso a Carlos Esquivel, quien con gran rapidez definió el 1-0 con disparo cruzado.
Pero el gusto sólo duró cinco minutos, ya que Francisco Fonseca logró el 1-1 en una de sus jugadas de riñones, ya que casi cayéndose punteó el balón para el 1-1.
En el complemento los rojos tuvieron las mejores llegadas, sobre todo un tiro sorpresivo de Esquivel que González desvió prácticamente con la uñas.
Después llegó el gol de Pereyra pero los rojos todavía tuvieron el empate cerca del final, aunque Edgar Dueñas falló otra vez y remató desviado.
Américo Gallego observó que lo justo hubiera sido un empate, "ya que tuvimos siete claras oportunidades de gol, pero no hay que llorar, perdimos pero no nos superaron".
Por su parte Isaac Mizrahi destacó "la unión en la cancha y la determinación de sus jugadores, "y señaló que la victoria servirá para retomar confianza.