Confían autoridades en que estén concluidas en la primera semana de febrero
Hundimientos retrasan obras alrededor de la Plaza Juárez
Con retraso de cinco meses, la primera semana de febrero concluirán los trabajos de remodelación de las calles de López, Luis Moya, Independencia, Dolores, Artículo 123 y Revillagigedo, aledañas a la Plaza Juárez, debido a problemas de hundimientos hasta de un metro; mientras, las obras de recuperación del Barrio Chino se prolongarán hasta el primer semestre del año, informó la administración capitalina.
Recordó que las primeras cuatro calles fueron entregadas en julio pasado, pero hoy lucen con el pavimento destrozado y cubiertas de cascajo, debido al continuo paso de vehículos pesados para la construcción de desarrollos inmobiliarios, como Puerta Alameda, un estacionamiento en la plaza y el Museo de la Tolerancia, en proceso de edificación en la calle José María Marroquí, donde ya se concluyó la plazoleta.
Rechazó que se trate de una doble inversión, porque las partes que sirvan se utilizarán y en "eso nos ayudarán los desarrolladores, para recuperar las vialidades y banquetas de la zona, pues ellos también están haciendo obra constructiva" para cumplir con la cuarta y quinta etapa de rehabilitación del corredor Reforma-Alameda, tendiente a la repavimentación y renivelación de dichas calles.
Los sismos de 1985 afectaron severamente el subsuelo de la zona y las instalaciones, lo que provocó un "ligero retraso" con algunas fases de la obra, particularmente con la electricidad, por los hundimientos diferenciales que se presentan. Por ejemplo, en la calle Revillagigedo, entre Juárez e Independencia, existe un desnivel hasta de un metro, encontrando una banqueta que empieza a nivel de piso en Juárez, mientras el Museo de Arte Popular está a un metro.
Por ello, mencionó, se ha requerido de un proceso especial de construcción, porque no sólo se trata de incorporar los servicios, como electricidad, telefonía, guarniciones, banquetas, arroyo vehicular y alumbrado público, sino de impedir la inundación de las calles mediante la construcción de los cárcamos que se necesiten.