Ocho ejecutados por el narcotráfico en cuatro estados
En otra jornada violenta por pugnas entre narcotraficantes, ocho personas fueron ejecutadas en Tamaulipas, Guerrero, Baja California y Sinaloa.
En el municipio fronterizo de Nuevo Laredo, Tamaulipas, tres personas, sólo una identificada -Manuel Siáñez, de 48 años- fueron asesinadas la noche del jueves, y sus cuerpos quemados en una camioneta Chevrolet Tahoe reciente, que fue abandonada en la colonia Victoria.
La procuradora de la entidad, Mercedes Guillén Vicente, declaró que la Federación se niega a atraer las investigaciones de los homicidios en territorio tamaulipeco, donde hay indicios de la delincuencia organizada (16 durante enero).
En otros hechos, una mujer y dos hombres fueron asesinados, y otros dos resultaron heridos cuando desde un vehículo que circulaba por la periferia del puerto de Acapulco, Guerrero, les dispararon con un rifle AR-15. Las víctimas, originarias de San Luis San Pedro, región de la Costa Grande, son Francisco Pérez, Alejandro Urbina y Lesly Barrera, quienes se dirigían, con Francisco Soberanis y Salvador Barrera -quienes resultaron heridos- a visitar a unos familiares en la colonia Libertadores, a un lado del penal de esta localidad.
En Tijuana, Baja California, con siete impactos de bala 9 milímetros, fue localizado el cadáver de un hombre, dentro de una camioneta pick-up abandonada en la colonia Popular de la delegación Sánchez Taboada. La policía municipal adelantó que el nombre de la víctima es José Concepción Aguilar.
En Elota, Sinaloa, la policía halló en un canal de desagüe los restos de un hombre de 40 años que fue asesinado a tiros.
Martín Sánchez, Carlos Figueroa,
Misael Habana, Antonio Heras y Javier Valdez