Exigían asilo; "violencia sin justificación": ACNUR

Mueren unos 20 sudaneses luego de sufrir embate policiaco en El Cairo

AFP, DPA Y REUTERS

El Cairo, 30 de diciembre. Alrededor de 20 refugiados y demandantes de asilo sudaneses murieron hoy y otros 30 resultaron heridos durante una estampida y luego de que la policía egipcia arremetió contra ellos, al desalojarlos de un parque en el que acampaban frente a oficinas de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Unos 2 mil policías antidisturbios irrumpieron violentamente la madrugada del viernes en el parque, donde cientos de refugiados del sur de Sudán se encontraban protestando desde septiembre pasado en una zona céntrica de El Cairo, en reclamo de reconocimiento como refugiados y poder viajar como asilados a algún país occidental.

Los uniformados actuaron sin miramientos con porras, palos, chorros de agua y gases lacrimógenos para desalojar a los manifestantes, entre los que había numerosas mujeres, ancianos y niños. Tres de los menores se cuentan entre los muertos, además de que 23 de los propios policías resultaron heridos.

Las agencias de prensa reportaron que hubo 10 muertos y 30 heridos como consecuencia de "una estampida", de acuerdo con un informe del Ministerio del Interior egipcio. Sin embargo, The Independent afirmó que el número de muertos se elevaría a unos 20 e incluso podrían ser hasta 30, citando a uno de los manifestantes.

Otra valla de unos 4 mil uniformados impidió la huida de los refugiados, de modo que obligaron a unos 3 mil a subir a autobuses; la mayoría fueron trasladados a un campamento militar al sur de la capital. Atrás dejaron sus pertenencias, entre mantas, colchones, maletas y otros objetos.

El titular del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Antonio Guterres, se declaró en Ginebra "profundamente conmocionado y entristecido" por estas muertes. "No hay justificación para tal violencia y pérdida de vidas; esta es una terrible tragedia", afirmó, y expresó sus condolencias a todas las familias afectadas.

Sin embargo, el Ministerio del Interior egipcio sostuvo que la policía sólo intervino tras haber tratado "en vano" de convencer a los manifestantes de retirar su campamento. Añadió que esa instalación era "ilegal" y que los sudaneses habían amenazado con incendiar las oficinas de la ONU.

"Quieren matarnos", gritó uno de los refugiados. "Nuestras demandas son legítimas; es nuestro deber manifestarnos aquí, el único derecho que tenemos."

Pero el gobierno egipcio también afirmó que el desalojo obedeció a cuestiones sanitarias y a la inconformidad externada por los vecinos.

Los refugiados fueron expulsados tras la guerra de 21 años en Sudán que terminó en enero, y según fuentes oficiosas en Egipto hay unos 2 millones de migrantes del vecino país. ACNUR, a su vez, alega que no puede conseguir que todos sean reubicados en otros países.