Deducibilidad de impuestos al combustible, pretexto para aplicar sobreprecio de 6%
Disposición del SAT amplía ganancias de las gasolinerías
Las dependencias involucradas no han fijado su posición al respecto
Denuncia Profeco ante Pemex robo a consumidores de cerca de $20 mil millones anuales por cantidades incompletas
Ampliar la imagen Gasoliner�ubicada en la colonia Cuauht�c que ya cuenta con el nuevo sistema de cobro FOTO Mar�Melendrez Parada Foto: Mar�Melendrez Parada
Los expendedores de gasolinas trasladan un sobreprecio de hasta 6 por ciento a los consumidores, el cual duplica el ingreso que obtienen por la venta de cada litro de este carburante.
Todo parece indicar que la disposición fiscal para disminuir el pago de impuestos por medio del consumo de gasolinas cubierto por medios electrónicos constituye un nuevo campo de rentabilidad a los intermediarios financieros, pero por ahora los gasolineros aplican la medida sin rendir cuentas sobre el beneficio extra que les deja el traslado al consumidor final de las comisiones presuntamente cobradas por la banca.
Esta elevación se da en forma independiente al incremento acumulado de 30.7 por ciento en el precio de este energético desde enero de 2001, según informes del Banco de México. Pero duplica la comisión de 5.9 por ciento con la que se quedan los expendedores por cada litro de gasolina vendida.
Frente a esta situación todas las dependencias y asociaciones involucradas no han fijado su posición. Las autoridades del Servicio de Administración Tributaria (SAT), responsables de la disposición, se han limitado a orientar sobre los formatos fiscales para la deducibilidad correspondiente. La Asociación de Bancos de México (ABM) informó que ha recibido múltiples quejas por la aplicación de este sobre precio por parte de los gasolineros.
Petróleos Mexicanos (Pemex), la empresa responsable de cuidar la calidad del servicio de sus franquicias, se mantiene indiferente ante el descontento de los consumidores. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha minimizado sus atribuciones a cuidar "que se den litros de a litro", cosa que tampoco ocurre.
El titular de la Profeco, Carlos Arce Macías, denunció ante los directivos de Pemex, que existe un robo de cerca de 20 mil millones de pesos al año a los consumidores de gasolinas, porque los concesionarios despachan litros incompletos. Pero la paraestatal se mantiene omisa a sancionar las irregularidades que perpetran los beneficiarios de sus franquicias.
Y hasta la Comisión para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), se ha limitado a dar la bienvenida a esta medida porque "reduce el uso de efectivo en las transacciones y con esto aumentar el grado de bancarización de la población y tener mayores elementos de deducibilidad fiscal.".
Entre tanto, los gasolineros afiliados a la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) se resisten a absorber los costos de la disposición fiscal y afirman que la medida representará una ganancia de 700 millones de pesos a los bancos. En tanto, que la ABM, que ha recibido múltiples quejas de los consumidores, informó que "la compra de combustibles con tarjeta de crédito o débito es un servicio más de sus bancos y se brinda sin comisión alguna para los tarjetahabientes". Incluso hizo público los teléfonos 5722 43 08, 09 y 36 para la atención de los quejosos.
Inbursa, uno de los principales emisores de medios electrónicos para el pago de gasolinas, informó que la comisión que cobra por el servicio -dirigido principalmente a empresas con flotillas- "varía de acuerdo al número de unidades afiliadas", y se establece "en base al consumo mensual que se tenga".
Hasta ahora este grupo financiero tiene registradas 1076 gasolineras en todo el país que admiten su tarjeta de prepago y pretende en el corto plazo "contar con 4 mil estaciones con terminales instaladas".
En los contratos establecidos entre los emisores de vales para gasolina y los expendedores del carburante existe una cláusula que señala que el gasolinero no está autorizado a repercutir ninguna comisión al usuario; sin embargo, a partir de la disposición fiscal del SAT, se ha generalizado la práctica de trasladar al consumidor final un sobre precio que llega a ser hasta de 6 por ciento.
A río revuelto...
El consumo de gasolina en México ha ido en ascenso durante la administración de Vicente Fox, al grado de que entre enero y septiembre de este año la venta de este combustible representó ingresos por 290 mil 270 millones de pesos para Pemex, de los cuales 17 mil 730 millones de pesos correspondieron exclusivamente a la aplicación del impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS).
Según la ABM actualmente hay 2 mil 908 gasolineras que cuentan con terminales para el cobro electrónico a través de monederos electrónicos, tarjetas de débito y de crédito, las cuales representan 41.3 por ciento de las 7 mil 365 franquicias otorgadas por Pemex, de las cuales 7 mil 150 son de servicio al público en general y el resto sólo para empresas con flotillas propias.
Se pretende, informó la ABM, que 15 por ciento del consumo de gasolinas se realice por estos medios. El cobro de una comisión de 3 por ciento le representaría a los intermediarios financieros un ingreso anual de mil 200 millones de pesos por la prestación de este servicio.
Según el subdirector comercial de refinación de Pemex, Carlos Pani, los contratos para el otorgamiento de franquicias han sido modificados para elevar su rigurosidad.
Pero advirtió que aunque las reglas para conservar la franquicia son más estrictas, la paraestatal no tiene mayor control para otorgarlas, ya que la ley indica que debe proporcionárselas a todo aquel que demuestre ser mexicano, tener el terreno adecuado para instalarse y el dinero suficiente para la inversión. Esta fue la causa del descontrolado crecimiento de las gasolineras, apuntó Pani y anunció que la paraestatal propondrá a la Secretaría de Hacienda ampliar el margen de la comisión con la que se quedan los expendedores, la cual actualmente es de 4.36 por ciento en las ventas de diesel y de 5.9 por ciento en las gasolinas.