La película aspira a presentar más al ser humano

Al estilo Hollywood presentaron en Argentina Amando a Maradona

DPA

Buenos Aires, 23 de diciembre. Los incondicionales de Diego Armando Maradona tienen ahora, en el cine, nuevas razones para venerar a su ídolo, con una nueva película que se presentó a la prensa, en Buenos Aires, en medio de una fiesta al estilo de Hollywood.

Amando a Maradona se llama el largometraje, con características de documental, que dirigió el realizador argentino Javier Vázquez en una producción que contó con el apoyo de una empresa de Nueva Zelanda.

Durante la fiesta, en un cine céntrico de la capital porteña, Vázquez dijo que "Maradona es un sentimiento que entiende todo el mundo" y agradeció la buena disposición del ex astro para permitirle entrar a su casa y a la intimidad de su vida.

La película resume la pasión, la excitación colectiva, el magnetismo y la idolatría que genera Maradona en el mundo, pero aspira a mostrar al Maradona ser humano, con sus virtudes y sus defectos.

El propio ex futbolista confesó que él es así, tal como se le ve allí, porque la película recorre todos los paisajes naturales y humanos, desde la infancia a la actualidad, incluyendo la pobreza que lo marcó en su niñez.

Esa veneración casi religiosa que provoca Maradona en sus seguidores generó un hecho poco común en una sala cinematográfica: la película fue interrumpida varias veces por aplausos cerrados del público y cánticos colectivos, más comunes en la tribuna de un estadio de futbol.

El eje de Amando a Maradona es su propio testimonio, grabado en Cuba, cuando pesaba más de 100 kilos e intentaba recuperarse de su adicción a las drogas, cosa que ha ido consiguiendo, paulatinamente, desde que en marzo de este año se sometió a un bypass gástrico en Colombia.

"Yo soy popular, pero no público; me fui del Barcelona porque creyeron que con la firma de un contrato te compraban la vida. Y no es así", son algunas de las definiciones que aparecen en la película, y que son características de su personalidad.

Uno de sus amigos de la infancia Gregorio Goyo Carrizo, que aún vive en Florito, la empobrecida zona donde se crió con el ex futbolista, cuenta que un día su esposa le dio a elegir entre ella y Maradona. "Y yo elegí a Diego'', confiesa sonriendo.

En la fiesta del jueves, que se prolongó hasta la madrugada de este viernes, estuvieron muchos invitados de la cultura, el deporte, la política, seguidores de la "iglesia maradoniana", amigos y familiares.

Entre ellos Lionel Messi, Javier Zanetti, Sergio Goycochea, Carlos Calvo y el músico Charly García, además del músico y cantante cubano Alex Batista, que cerró la fiesta cantando en homenaje a su amigo argentino.