De 101 averiguaciones por secuestro, 64 se resolvieron satisfactoriamente, dice
Han muerto tres agentes en acciones de rescate de plagiados, señala Bátiz
Rechaza Elías Alvarez versiones de que policías judiciales formen parte de bandas
Con la muerte de la agente de la Fiscalía de Seguridad de las Personas e Instituciones, Laura Patricia Mercado López, suman tres casos en los que mueren efectivos en el intento de rescatar a víctimas de secuestro, informó el titular de la procuraduría capitalina, Bernardo Bátiz Vázquez, quien agregó que en lo que va del año la dependencia a su cargo ha iniciado 101 averiguaciones previas por plagios.
De esos casos, 64 se resolvieron satisfactoriamente e incluso se logró la detención de integrantes de las bandas; sin embargo, a cuatro personas secuestradas este año no fue posible salvar sus vidas, agregó el funcionario.
Sobre el menor de 12 años que fue secuestrado y la banda involucrada, Bátiz Vázquez rechazó dar mayor información, sólo dijo que la Policía Judicial realiza intensas labores para esclarecer el caso del homicidio de Mercado López. "Hay datos y yo creo que vamos a resolver este caso", dijo.
El director de Secuestros de la procuraduría capitalina, Elías Alvarez Hernández, consideró que probablemente "la próxima semana se logre dar con el paradero de los asesinos de la agente, ya que las investigaciones van muy adelantadas".
Agregó que en la zona de la colonia San Miguel Teotongo, en la delegación Iztapalapa, se han detenido a otras bandas de secuestradores dedicados al plagio de menores de edad, incluso, dijo, se logró la captura de una familia completa dedicada a este delito, quienes ya se encuentran en la cárcel.
Sobre las versiones que apuntan hacia una presunta participación de elementos de la Policía Judicial involucrados con las bandas de secuestradores, el comandante rechazó esa información y precisó que se trata de un grupo que opera en la zona, que ha cobrado la vida de elementos de otras corporaciones y ha protagonizado otros enfrentamientos; sin embargo, "no ha sido identificado y por ello no se ha logrado combatir".
Respecto del enfrentamiento entre agentes judiciales encubiertos y plagiarios, en el que murió la agente Laura Patricia Mercado López, la noche del martes, la PGJDF emitió un comunicado en el que revela detalles de los hechos. Informa que una vez que el Ministerio Público tomó conocimiento de la privación ilegal del menor, turnó el caso a la Fiscalía para la Seguridad de las Personas e Instituciones, mediante la cual los agentes, incluida Mercado López, dieron seguimiento e instruyeron a la familia para la negociación del rescate.
Cuando los afectados recibieron la indicación sobre el lugar de la entrega del dinero, 15 elementos de la Policía Judicial instrumentaron un dispositivo alrededor de la persona que haría la entrega. Los plagiarios pidieron a la víctima que se dirigiera a una panadería ubicada en la avenida Ermita Iztapalapa; tras esperar unos minutos en el lugar, el afectado recibió otra llamada en la que se le pedía dirigirse al municipio de Los Reyes La Paz y estacionarse afuera de un centro comercial; nuevamente los plagiarios se comunicaron y le pidieron descender del vehículo, caminar hacia la parte trasera del establecimiento, llegar a la autopista México-Puebla, subir el puente y pasarse del otro lado.
En ese momento se desplegó el operativo policial, donde los agentes Laura Patricia Mercado López y Gerardo David Castañeda Almanza fueron sorprendidos por tres sujetos que los recibieron a balazos. Tras la agresión, los atacantes se dieron a la fuga en un taxi ecológico, con rumbo hacia el cerro de San Miguel Teotongo.
En el lugar perdió la vida Mercado López, al recibir dos impactos de bala en el cuello y otro en el hombro, mientras que su compañero resultó gravemente lesionado. De acuerdo con la procuraduría capitalina, Castañeda Almanza se encuentra en el área de terapia intensiva del Hospital Dalinde, donde se recupera satisfactoriamente.
En tanto, agentes judiciales mantienen vigilancia permanente en hospitales del Distrito Federal y del estado de México, para detectar personas que ingresen al servicio de urgencias, debido a que se presume que uno de los plagiarios resultó herido.