Ser cabeza de grupo dará serenidad al Tricolor, dijo García Aspe

No debemos confiarnos; tenemos que matar dentro de la cancha: La Volpe

AGENCIAS

Leipzig, Alemania, 8 de diciembre. Después de la designación de México como cabeza de grupo para el Mundial Alemania 2006, el técnico Ricardo Antonio La Volpe no sólo está satisfecho, sino también consciente del panorama que se abre para la selección nacional, porque evitar "en la primera fase a las grandes potencias (como posibles rivales) es muy bueno".

Sin embargo, sabe que no deberá confiarse ante esta circunstancia porque aseguró que todos los partidos que afrontarán serán complicados, por lo que espera que sus jugadores enfrenten cada juego como si se tratara de una final en la cual deberán dejar de lado el cálculo matemático: "le ganamos a éste, con éste empatamos para poder pasar", y añadió:

"Tenemos que matar dentro de la cancha, dejar todo y lograr lo que espera todo México, que es romper eso mitos que hay y conseguir estar dentro de los mejores."

Aunque La Volpe señaló que la responsabilidad no se inicia con esta designación de la FIFA, pues indicó que todo empezó desde que asumió la dirección técnica del Tricolor, reconoció que en los próximos meses tendrá que dar el último paso de lo llama el "famoso proceso", en el que tratará de no equivocarse en la elección de los 23 jugadores con los que asumirá su compromiso el año entrante.

"Lo más lindo será el primer partido, porque ahí se verá si trabajaste bien o mal. Creo que hemos hecho el proceso más allá de que la FIFA haya dado este lugar", comentó.

Por su parte, a unas horas de que se realice la rifa en la que se conocerán los próximos rivales de México, el ex seleccionado mexicano Alberto García Aspe resaltó que la ubicación como cabeza de serie dará mayor serenidad al Tri.

"En el sorteo se espera que se tenga como resultado la ubicación en un buen grupo, uno a modo en el que puedas avanzar a la segunda ronda, aunque ese pase es una costumbre de la selección", expresó.

"Encabezar un sector lo veo relativamente positivo, aunque siempre te vestirá que seas cabeza de serie", matizó el ex capitán nacional.

En cambio, para el presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Alberto de la Torre, ser considerado entre los ocho grandes de la FIFA significa una responsabilidad muy grande, porque "es por lo menos en donde debes quedar".

"Contó mucho la buena impresión que dejó la selección (en la Copa Confederaciones)", destacó De la Torre y aunque aceptó que hubo problemas administrativos y de dopaje en los casos de Salvador Carmona y Aarón Galindo, que mermaron la relación con la FIFA, se congratuló de que ahora esto demuestra que todo va "excelente".

Respecto al caso de los jugadores mexicanos sancionados por dopaje, el federativo adelantó que ya se analiza tratar el tema ante el organismo internacional de futbol para intentar levantarles el castigo.