Las declaraciones de Yoko Ono en su nombre despiertan respeto o irritación
Luego de 25 años, se mantiene lucha por el legado de Lennon
Su primera esposa, Cynthia, publicó en octubre pasado John, libro de memorias
Nueva York, 7 de diciembre. Un cuarto de siglo después de que John Lennon fue asesinado frente al edificio donde vivía en Nueva York, aún se mantiene la lucha entre su familia, amigos y fans por el control del legado del ex Beatle.
Definir a Lennon se ha convertido, desde su asesinato, el 8 de diciembre de 1980, en una industria que incluye exhibiciones, memorias, rediciones de discos, documentales y hasta un musical de Broadway.
La guardiana del legado de Lennon y principal protectora de su imagen póstuma es su viuda, Yoko Ono, de 72 años, quien continúa actuando como su portavoz en temas que van desde la música contemporánea hasta la guerra en Irak.
"Estoy segura de que John habría estado terriblemente disgustado" por la guerra, dijo Ono en una entrevista en marzo de 2003.
"Y estoy segura de que habría expresado su enojo y los habría regañado", añadió, en referencia al presidente estadunidense George W. Bush y el primer ministro Tony Blair.
Ono, por muchos considerada un factor que incidió fuertemente en la separación de los Beatles, ha dividido siempre a la opinión pública y sus declaraciones en nombre de Lennon son recibidas con una mezcla de respeto e irritación.
En los días previos al 25 aniversario de la muerte de Lennon, otras voces han intentando desafiar el mito según Ono y ofrecer una imagen más terrena de un héroe cultural cuya muerte prematura lo convirtió en una figura casi santa.
En sus memorias tituladas John, publicadas en octubre, la primera esposa de Lennon, Cynthia, escribió sobre el "dolor, tormento y humillación" que sufrió durante su matrimonio con un hombre que podía ser tan cruel como amable.
Cynthia, de 66 años, presentó las memorias como "la verdadera historia del verdadero John", mensaje reiterado por el hijo de Lennon, Julian, en el prólogo del libro.
"Para que existiera una imagen equilibrada de la vida de papá, la versión de mamá de la historia era necesaria desde hace tiempo", escribió.
En un comunicado separado sobre el 25 aniversario, Julian Lennon admitió que tenía "sentimientos muy encontrados" sobre su padre. "Fue el padre que amé y que me defraudó de muchas maneras", indicó.
Ono, en tanto, aprovechó el aniversario para editar una compilación de encendidos tributos de celebridades como Elton John y Mick Jagger, quienes, según la contratapa del libro, "recuerdan a Lennon como visionario y amigo, músico y artista, esposo y padre".
En su propia introducción, Ono indicó que el paso de los años no ha disminuido el dolor generado por el asesinato de Lennon. "Cuando estoy sola, cuando la luz del atardecer comienza a empapar el mundo de rosado, en la oscuridad de la noche y el amanecer, mi corazón aún se agita y no se detiene", escribió.
Ono ha autorizado una serie de proyectos retrospectivos en los últimos años, generando críticas de algunos que sostienen que está convirtiendo el nombre de Lennon en una marca.
"No creo estar comercializando a John para nada -dijo Ono en una entrevista-. Si yo no lo hiciera, algunos lo harían y harían una especie de versión barata de él o algo así. Y destruiría el trabajo de John. Yo tengo que proteger su trabajo."
Ono ha demandado a ex empleados por intentar vender objetos robados de Lennon; se peleó con Paul McCartney por su intento de invertir el famoso crédito Lennon-McCartney, y el mes pasado los productores de un musical sobre Lennon en Gran Bretaña tuvieron que cambiar drásticamente el espectáculo luego de que los amenazó con llevarlos a juicio.
Un musical aprobado por Ono sobre la vida y obra de Lennon fue presentado en Broadway a principios de este año, pero salió de cartelera luego de apenas cinco semanas, tras críticas mordaces.
Ono también ha peleado para mantener tras las rejas a quien disparó contra Lennon, Mark Chapman, y recientemente se molestó con la cadena NBC por conmemorar la muerte de Lennon con la emisión de una antigua entrevista con su asesino.
Chapman, arrestado en la escena del crimen, cumple una sentencia de 20 años de prisión. Tiene 50 años, y en 2004 le fue negada la libertad condicional por tercera vez.