El crédito transforma a México cambiará de ubicación el próximo sábado

Atestiguará hija de Juan O'Gorman el traslado de un mural del artista

Por el centenario del pintor presentan dos exposiciones en el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo

María Elena O'Gorman desea donar libros de su padre a un museo

MERRY MACMASTERS

El sábado 10, a partir de las 22 horas, se efectuará el traslado del mural El crédito transforma a México, que Juan O'Gorman (1905-1982) pintó entre 1964 y 1965 para el edificio de Paseo de la Reforma 156, del entonces Banco Internacional, a las nuevas oficinas del banco HSBC, localizadas sobre la misma avenida, pero frente al monumento a la Independencia. Allí estará más a la vista del público.

La maniobra estará a cargo del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA). Para Walter Boelsterly, director del Centro de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble del INBA, el corto recorrido será ''latoso", pues la obra pesa 40 toneladas.

El mural mide 21.30 metros de largo por 3.15 de altura y 10 centímetros de espesor; para que no se fracture, se emplazó una estructura de acero para ''ensandwicharlo. Llevamos rato trabajando en esto", apuntó.

El lado sarcástico del artista

La acción coincide con el término de un año de actividades por el centenario natal del arquitecto y pintor. Unos días antes fueron inauguradas las exposiciones Utopía/ no utopía: la arquitectura, la enseñanza y la planificación del deseo y Fantasía/ realidad: diálogos con Juan O'Gorman, en el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, también obra suya.

Para la ocasión viajó a México la hija del homenajeado, María Elena O'Gorman, quien vive en San Antonio, Texas, que fue adoptada por el matrimonio formado por el muralista y la también artista, la estadunidense Helen Fowler, cuando tenía 18 meses de nacida. Bunny, como le decían sus padres, vivió tanto en la casa de San Jerónimo como en la de Jardín 88, a unos pasos del actual museo de Rivera y Kahlo.

-¿Qué recuerdo tiene de su padre?

-Era muy cariñoso conmigo y se preocupaba mucho, pero también tenía su lado sarcástico. Solía decir que toda persona mayor de 20 años era horrible.

''Yo estaba muy cercana a él, pero no lo veía mucho porque siempre estaba trabajando en sus murales, entonces estaba ausente mucho tiempo. Pero mi madre y yo íbamos a llevarle su cena a Chapultepec.''

-¿Cómo se conocieron sus padres?

-Mi madre vino a México a estudiar con Diego Rivera, quien le dijo: ''tienes que conocer a Juan O'Gorman''. Ella se rió de la combinación Juan con O'Gorman. Creo que se casaron como tres veces, pero cuando yo estaba con ellos permanecieron en matrimonio hasta que él murió. Los dos eran de carácter fuerte. Cada quien sabía lo que quería, pero se necesitaban el uno al otro.

Acervo bibliográfico

Presente en la entrevista, Magdalena Zavala, directora del Museo Casa Estudio, pregunta cómo era la relación de Bunny con sus padres, porque ''hay muchos mitos al respecto". María Elena O'Gorman contesta: ''En el libro de Bital dicen cosas de que mi mamá era una persona mala. Y no, eran los dos, porque se daban cuerda. Sin embargo, al final siempre se ayudaban''.

Rodeada por retratos, autorretratos y paisajes de su padre que integran Fantasía/ realidad, manifiesta: ''De chica veía todo eso como muy cotidiano. Ahora es como ¡wow! Siempre había gente de todo el mundo de visita en la casa. Ahora veo que no era tan normal, sino muy especial".

Como heredera de O'Gorman, no se puede decir que María Elena posea un archivo: ''Tengo algunas cosas de mi madre, como recortes. Pero al morir, muchas que estaban en su estudio fueron recogidas". Lo que sí tiene son muchos de los libros de su padre que le gustaría donar a algún museo.

Del homenaje al artista, expresa: ''Le hubiera encantado, porque su idea del arte era compartirlo".