Usted está aquí: jueves 8 de diciembre de 2005 Sociedad y Justicia El video no prueba que la PFP realiza homicidios o levantones, dice la SSP

Los narcos torturados se refieren a policías municipales, no federales, asegura

El video no prueba que la PFP realiza homicidios o levantones, dice la SSP

Argumentó que los elementos de esa corporación llegaron a Nuevo Laredo en junio

GUSTAVO CASTILLO GARCIA

La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal deslindó a la Policía Federal Preventiva (PFP) de la comisión de homicidios y levantones en Tamaulipas. Mediante un comunicado de prensa, la dependencia aseguró que los señalamientos que hace uno de los miembros del cártel del Golfo en un video que se difunde actualmente se refieren a policías municipales de Nuevo Laredo, Tamaulipas, y no agentes federales.

Según la institución que dirige Eduardo Medina-Mora Icaza, Sergio Alberto Escamilla, una de las cuatro personas a las que presuntamente ejecutaron integrantes del cártel de Sinaloa, se refierió en la grabación no al Grupo de Operaciones Especiales (Gopes) de la PFP, sino al Grupo de Operaciones Tácticas (GOT) que tenía la policía municipal de Nuevo Laredo y que fue desarticulado con el inicio del programa México Seguro.

La SSP federal puntualizó que el video fue fechado el 16 de mayo de 2005, y el GOT fue constituido en abril de 2000 y desapareció el 13 de junio del presente año, al iniciarse el programa México Seguro en esa localidad.

Además, señaló la dependencia, "los efectivos de la PFP que actualmente desarrollan el operativo México Seguro en Nuevo Laredo llegaron a esa plaza el 11 de junio.

"En conclusión, el video no aporta elemento alguno que permita sustentar la participación de miembros de la Policía Federal Preventiva" en actos delictivos como ejecuciones extrajudiciales o levantones de narcotraficantes que no trabajaban dentro de la estructura del cártel del Golfo.

Como se recordará, según los testimonios recabados por la Procuraduría General de la República (PGR), la historia de ajusticiamientos entre narcotraficantes que quedó grabada en un video, se inició el 15 de mayo, cuando Sergio Alberto Ramón Escamilla, acompañado de su familia, y Juan Miguel Vizcarra, Andrés Tamariz y Edgar Eduardo Ortiz Paredes decidieron ir de vacaciones al puerto de Acapulco.

Los cuatro hombres y las dos mujeres fueron interceptados por tres camionetas con vidrios polarizados. De esos vehículos descendieron varios civiles y una persona vestida con un uniforme negro con las siglas de la Agencia federal de Investigación (AFI).

Los hombres y las mujeres fueron trasladados con violencia a una casa de seguridad. A ellas las dejaron en la planta baja. A los cuatro hombres los subieron al primer piso de la casa y según los datos que posee la SIEDO, ahí comenzó la tortura a los dos zetas y sus acompañantes, al tiempo que lo que revelaban a sus torturadores era reportado a "un sujeto que le decían la Barbie o El Comandante", Edgar Valdez Villarreal, operador y ejecutor del cártel de Sinaloa, y que trabaja bajo las órdenes de Arturo Beltrán Leyva, uno de los lugartenientes de Joaquín El Chapo Guzmán Loera.

 
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