Usted está aquí: sábado 26 de noviembre de 2005 Gastronomía Fallo en contra de la comida mexicana como patrimonio de la humanidad

La UNESCO admite 43 obras como parte del legado intangible de las culturas

Fallo en contra de la comida mexicana como patrimonio de la humanidad

Anuncia el CNCA que se persistirá en la postura para lograr la declaratoria

La decisión se debió a la vaguedad de las reglas establecidas por el organismo mundial, señala el consejo

ARTURO CRUZ BARCENAS

Ayer, a las cuatro de la mañana, hora de México, el jurado de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés), dio su fallo en contra de la designación de la comida mexicana como patrimonio oral e inmaterial de la humanidad.

El anuncio lo hizo el director general de la organización, Kochiro Matsuura. En un comunicado se informa de la proclamación de 43 nuevas obras maestras del patrimonio oral e inmaterial, entre las que figuran el Ramlila, representación tradicional del Ramayama (India), el teatro kabuki (Japón), la mascarada de los makishi (Zambia) y la samba de roda (Brasil).

Esta es la tercera vez que la UNESCO procede a la proclamación de obras maestras del patrimonio oral e inmaterial. Esta recompensa internacional tiene por objeto sensibilizar a la opinión mundial sobre el valor de este tipo de legado, que comprende formas de expresión populares, como las tradiciones orales, las músicas y danzas, los rituales y la mitología.

Asimismo, los conocimientos y prácticas relativos a la naturaleza y el universo, y las técnicas de la artesanía tradicional, así como los espacios culturales. Este patrimonio -frágil, en muchos casos- no sólo es un elemento esencial de la identidad de los pueblos y las comunidades, sino que además es representativo por antonomasia de la diversidad cultural, señala la UNESCO.

La proclamación de las 43 nuevas obras maestras fue propuesta al director general por un jurado internacional integrado por 18 miembros y presidido por la princesa Basma Bint Talal, de Jordania. El jurado se reunió del 20 al 24 de noviembre para examinar 64 candidaturas nacionales y multinacionales presentadas por 74 estados.

Las nuevas obras se suman a las 47 ya proclamadas en 2001 y 2003. La tercera proclamación reviste una importancia particular, porque probablemente será la última en su género. Fueron 32 candidaturas en 2001; 56 en 2003, y 64, en 2005.

No habrá marcha atrás: CNCA

La propuesta de México no pasó. Ante esto, ayer el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA) expuso lo siguiente: "El fallo de la UNESCO acerca de la proclamación de las Obras Maestras del Patrimonio Intangible suscita obligadamente algunas consideraciones: la causa de la cocina tradicional de México sale fortalecida y no hay marcha atrás en el movimiento que la candidatura mexicana suscita en el país.

"El reconocimiento no se dio debido a la insuficiencia y a la vaguedad de las reglas establecidas por la UNESCO respecto del patrimonio intangible.

"Opiniones de expertos calificados en ese organismo advirtieron que el expediente mexicano 'representaba concepciones muy avanzadas que se adelantaban con mucho a la definición estrecha del patrimonio cultural que se impuso en este caso'.

"Hay que decir con toda claridad que desde el momento mismo en que se presentó el tema de la comida tradicional mexicana como compleja manifestación cultural que implica a la naturaleza y la agricultura, se observó reticencia entre los técnicos de la organización. No obstante, se consideró indispensable mantener la iniciativa.

"Existe un cúmulo de testimonios que califican de audaz y válida la iniciativa mexicana, que fue capaz de desafiar rígidos cartabones que impiden ver a la cultura como un agente activo en el que se basa la vida actual de los mexicanos, con todas sus especificidades y con toda su originalidad.

"La decisión de la UNESCO en modo alguno debe frenarnos. Antes bien, debe actuar como incentivo para impulsar la elaboración de un marco teórico claro y a la vez más respetuoso de las prioridades y definiciones que los estados miembros tienen sobre su propio patrimonio cultural en el seno de la UNESCO.

"En esencia, lo que importa es desarrollar, con el mismo ánimo con el que elaboramos nuestro expediente, la campaña que lleve a los mexicanos a otorgar a nuestra propia cocina el papel fundamental que desempeña en la vida del país, tanto para la defensa del patrimonio cultural, como para el desarrollo socioeconómico de nuestra gente.

"En suma, seguimos viendo en la cocina tradicional de México una expresión del patrimonio intangible en la que convergen todos los fenómenos culturales más complejos, así como la manifestación de procesos históricos que siguen vigentes hoy día. Eso es lo que anhelamos: que sea reconocido en la Convención para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial recientemente ratificada por nuestro país.

"Sirva este ejemplo para que los órganos consultivos encargados de dictaminar y poner en operación la convención se doten de las herramientas adecuadas para examinar las propuestas y las políticas referentes a la salvaguarda del patrimonio oral e inmaterial de la humanidad."

Hasta ahí lo señalado por el comunicado.

Antecedentes

La idea de proponer a la gastronomía mexicana surgió en el congreso gastronómico de Puebla, en 2003. Ahí se conformó un comité donde el mayor peso recayó en el CNCA. El expediente -40 kilos de materiales- se entregó a la UNESCO en septiembre de 2004.

En enero pasado se envió información complementaria para la UNESCO -que la solicitó-, donde se acotan los datos de Michoacán, Puebla y Oaxaca.

A la iniciativa se sumaron restauranteros, especialistas y numerosos organismos, tanto públicos como privados. Pero el fallo fue negativo.

 
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