LOS DE ABAJO
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DESPUES DE LAS declaraciones en las que Vicente Fox advirtió a los futbolistas que sólo tienen que dedicarse a patear el balón y abstenerse de hacer declaraciones políticas (en alusión a la actuación de Maradona en Mar de Plata), el representante del gobierno de México en Milán buscó a los representantes del Inter de Milán para proponerles jugar un partido con la selección mexicana en apoyo a los damnificados de Chiapas por el huracán Stan.
CON UN OPORTUNISMO que no carece de humor, el cónsul mexicano en Milán contactó justo al equipo italiano que mantiene una relación política y de solidaridad con las comunidades indígenas zapatistas y con sus juntas de buen gobierno, con quienes además hay un partido de fútbol prometido y pendiente.
EL CONSUL MEXICANO explicó a los dueños del equipo de Milán que la propuesta es "organizar un partido con la selección mexicana y el Inter para recaudar ayuda para los damnificados de Chiapas".
EN UNA REUNION CELEBRADA este viernes entre el cónsul mexicano y Angelo Mario Moratti, la respuesta del Inter fue diplomática y fulminante: "Nosotros sólo tenemos relación en Chiapas con las juntas de buen gobierno zapatistas. Ellas son nuestro único referente y, por lo tanto, no es a nosotros a quienes tienen que plantearnos un partido, sino a las propias juntas. Cualquier cosa es con ellas".
NOSOTROS, EXPLICA Bruno Bartolozzi, les dijimos que recibimos todas las propuestas para jugar con el Inter porque queremos emplear el futbol como un camino para solidarizarnos con la dignidad de los pueblos y que, en ese sentido, y dadas las relaciones que han establecido con los zapatistas, "el gobierno mexicano tendría que pedir a las juntas de buen gobierno la posibilidad de realizar ese partido, pues ellas son la única entidad con la que el Inter se relaciona en Chiapas".
LA CONTRAPROPUESTA del cónsul, que no debió de sentirse muy cómodo en tal situación, fue que se podría organizar un partido entre un equipo zapatista, la selección mexicana y el Inter de Milán, y que todo lo recaudado se destinara a los damnificados de Chiapas. La respuesta del Inter fue la misma: la gestión de cualquier iniciativa tiene que pasar por las autoridades zapatistas. Tratándose de dinero, resaltaron, "sólo confiamos" en las juntas de buen gobierno para su administración y uso correcto.
FINALMENTE ACORDARON que el Inter sólo podría comprometerse a informar a las autoridades autónomas que ha recibido esta propuesta del gobierno federal. Pero la respuesta, dejaron claro, la tienen las comunidades indígenas rebeldes.
A PARTIR DE LA RELACION entre el Inter de Milán y las comunidades indígenas zapatistas, las relaciones del equipo italiano se han extendido a otros campos. El mes pasado la viceministra de relaciones exteriores para Europa del gobierno de Venezuela, Delcy Rodríguez, contactó al equipo de parte de Hugo Chávez, para proponerle un partido con la selección venezolana. "El presidente Chávez -explicó la viceministra- está interesado en relacionarse con el Inter porque conoce de su relación con los indígenas zapatistas".