Robaron documentos, acusa el premio Nobel argentino

Denuncia Pérez Esquivel saqueo en sede del Servicio de Paz y Justicia

STELLA CALLONI CORRESPONSAL

Buenos Aires, 9 de noviembre. El premio Nobel de la Paz 1980, Adolfo Pérez Esquivel, denunció hoy que la sede del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj), que dirige, fue objeto entre la anoche y esta madrugada de un saqueo y robo de documentos y computadoras, y que además sufrió destrozos.

Pérez Esquivel, cuya organización no gubernamental surgió en tiempos de la dictadura (1976-1983) para denunciar las graves violaciones a los derechos humanos, planteó fuertes sospechas sobre las motivaciones de "los desconocidos de siempre".

Mostró a La Jornada los destrozos en la sede del Serpaj, saqueada por individuos que actuaron con guantes para no dejar huellas digitales, según peritos policiales.

"Muchos periodistas preguntan si tendrá que ver con mi participación y la del Serpaj en la convocatoria a la III Cumbre de los Pueblos en Mar del Plata y en la multitudinaria marcha final del evento. Es sospechoso que esto suceda ahora, aunque es permanente nuestro trabajo contra la impunidad, la injusticia, la situación de América Latina, la defensa de los pueblos y la denuncia de la injusticia de las guerras, como sucede en Irak, contra el colonialismo", dijo.

Advirtió que plantea un "grave peligro" para organizaciones que luchan en ese sentido y marca señales de advertencia "en momentos en que tomamos posiciones muy precisas y hemos dado con esta cumbre un salto de calidad importante, y también cuando se produjo un hecho político como la marcha masiva y plural para darle un no rotundo a George W. Bush en Mar del Plata, a su política de muerte, y oponerle la nuestra en favor de la vida, la justicia y la paz".

El premio Nobel fue muy cuidadoso en acusar a algún sector, porque espera -y también demanda- la acción de la justicia, y lamentó el robo de seis computadoras -donde se guardaba mucha información-, faxs, teléfonos y otros documentos.

"Y hay que repetirlo: llama mucho la atención que este acto vandálico suceda días después de la Cumbre de los Pueblos. Esta sensación es inevitable y si es un mensaje esperamos que se encuentre a los responsables, porque indicaría una señal de peligro para el país, además de afectar nuestro trabajo permanente en derechos humanos y en temas humanitarios que nos ocupan".

Recordó que el documento final de la Cumbre de los Pueblos comenzaba con un "no rotundo al Area de Libre Comercio de las Américas, al libre comercio, la militarización y la deuda, y hacía un llamado a tomar posiciones concretas en la lucha contra la pobreza, el desempleo y la exclusión social, porque creemos posible y necesaria una integración desde y para los pueblos, y estamos creando una alternativa posible."

Pérez Esquivel, luchador por los derechos humanos, preso y torturado durante la pasada dictadura militar, sostuvo que algunos actos vandálicos en Mar del Plata tuvieron de objetivo que los medios masivos ignoraran las referencias a la III Cumbre de los Pueblos, que reunió a más de 12 mil personas de todo el continente.

Organizaciones de derechos humanos, políticas y sindicales de Argentina y otros países repudiaron lo sucedido en el Serpaj, se solidarizaron con Pérez Esquivel y exigieron al gobierno una investigación profunda y rápida de los sospechosos hechos.