Kléber marcó al 84, en jugada polémica
América mantiene su dominio sobre Cruz Azul: 1-0
El equipo de Carrillo se consolida como líder general
El árbitro Arredondo no marcó un penal cometido por Raúl Salinas
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Cuauht�c Blanco yace en el c�ed tras una falta FOTO Luis Humberto Gonz�z
Foto: Luis Humberto Gonz�z
América ganó 1-0 el llamado Clásico Joven y confirmó su jettatura sobre el Cruz Azul de Rubén Omar Romano, quien no pudo cobrarse revancha; por el contrario, sumó su cuarta derrota ante el equipo amarillo. Aguilas se confirmó en la cima del torneo casero, mientras la Máquina perdió posiciones.
La solitaria anotación del partido cayó al minuto 84 y fue obra de Kléber Boas en remate cruzado al aprovechar un gran servicio de Cuauhtémoc Blanco, en jugada polémica, ya que parecía estar en posición adelantada.
El gol disipó las silbatinas que comenzaban a surgir en las atiborradas tribunas del estadio Azteca, donde el rostro y el silencio de los aficionados cementeros fueron el vivo retrato de la desilusión, que contrastó con la alegría de los americanistas, quienes momentos después desalojaron el inmueble al grito de "¡águilas, águilas!"
El primer tiempo comenzó con un intenso ritmo que pronto decayó porque ninguno de los contrincantes renunció a su estilo, pero tampoco alguno pudo imponerse, ya que mientras el contragolpe americanista careció de efectividad, la Máquina hasta aburrió con su habitual abuso en los pases.
El arbitraje de Germán Arredondo fue localista. Al minuto 4 no marcó una mano de Raúl Salinas en el área y cuidó en exceso a Blanco, a quien perdonó una desproporcionada rabieta.
Las rápidas descolgadas de Aguilas dieron mayor sensación de peligro, como ocurrió en el avance de Blanco al minuto 27, cuyo centro logró cabecear Kléber, pero el Conejo Pérez estuvo atento para contener el balón.
Gabriel Pereyra lució errático y poco creativo. Francisco Fonseca, que parecía engarrotado, recibió un par de buenos servicios, quiso acomodarse la pelota y siempre fue desarmado por los defensas.
Los cementeros volvieron del descanso con mayor dinámica y acosaron con más ímpetu que buen futbol la meta defendida por Guillermo Ochoa, por lo que Carrillo debió ingresar a Irenio Soares.
El Burrito Rivero hizo volar en gran lance al portero local, quien logró desviar el balón a tiro de esquina.
Los azules, claros dominadores en el segundo tiempo, se cansaron de perder oportunidades. Kikín Fonseca por fin pudo conectar el balón al minuto 73; sin embargo, su cabezazo picado fue directo a la posición del guardameta Ochoa. El arquero volvió a salvar a su equipo seis minutos después, al desviar con el pie un tiro de Chávez.
Aguilas, que en ese periodo tuvo pocas llegadas, no perdonó, y Kléber, quien salió entre aplausos al 88, se vistió de héroe con su tanto agónico.
Al final, Romano señaló: "Mantengo mi objetivo, que es el campeonato, una derrota no me va a hacer nada. Mi equipo tuvo una gran actuación durante el segundo tiempo. Lamentablemente, faltando poco tuvimos una desconcentración. Creo que es injusto el resultado, pero así es el futbol y hay que meter la pelota".