El Correo Ilustrado
En defensa de la Cooperativa Pascual
Señora directora: Los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y los altos funcionarios del Poder Judicial de la Federación (PJF) en los últimos 10 años se han enriquecido al asignarse sueldos, prestaciones y otros beneficios laborales, con ingresos anuales de cada uno de los 10 ministros de la SCJN que, por ejemplo, rebasan los 3 millones de pesos, ya que además de su sueldo base, se agrega una serie de prestaciones que el PJF se ha otorgado, como ramo autónomo del presupuesto y cuyo monto aprueba la Cámara de Diputados.
El pago de energía eléctrica, agua, teléfono, gas, impuesto predial, dos vehículos, tres equipos de comunicación móvil, gastos por alimentación, fondo para compra de casas, estímulos por antigüedad, jubilación e incapacidad médica permanente, entre otros, son los beneficios de que gozan los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, quienes en estos días habrán de definir el asunto de los trabajadores de la Cooperativa Pascual, que actualmente se encuentra en litigio por los terrenos donde se asientan sus plantas en el Distrito Federal y cuya posesión reclama un particular.
Del inminente fallo contra los trabajadores de la cooperativa, las principales beneficiarias serán, por supuesto, las trasnacionales, como Coca-Cola y Pepsi Cola, que tienen acaparado el mercado y cada año sacan recursos millonarios del país producto de la explotación de cientos de miles de trabajadores.
Ante esta ofensiva, Unidad Obrera y Socialista (Uníos), integrante de Alianza Socialista y participante de la otra campaña, manifiesta su más amplia solidaridad para con los trabajadores de la Cooperativa Pascual, empresa netamente mexicana, administrada por los propios trabajadores, en la que son también ellos los propietarios de los medios de producción y quienes han hecho de la cooperativa una empresa exitosa capaz de competir con las grandes trasnacionales, demostrando, asimismo, que se puede colectivizar la riqueza por ellos mismos generada. ¡Viva la Cooperativa Pascual!
Atentamente.
José Antonio Salas C., Comisión de Comunicación de Uníos
Respecto de la UNAM
Señora directora: La información que documentó el 3 de noviembre La Jornada, referente a que la UNAM es, de acuerdo con la clasificación internacional de The Times, una de las mejores 100 universidades del mundo y el lugar 20 entre las de excelencia, nos enorgullece a todos los universitarios y nos congratulamos de que sea, además, la primera en Hispanoamérica en cuanto a nivel académico, lo cual enaltece a nuestro país ante el mundo. Lástima que sus trabajadores administrativos -apoyo fundamental para este avance- estemos en la miseria por los bajos salarios que en cada "revisión salarial" se acuerdan. Ejemplo reciente de lo anterior es el 3.95 por ciento que en la revisión salarial de hace unos días se nos impuso.
Atentamente
Pedro Hernández López, Taller de Análisis de los Trabajadores Administrativos de la UNAM
Movilización campesina
Señora directora: Me dirijo a usted para informarle que en los próximos días diversas organizaciones firmantes del Acuerdo Nacional para el Campo, así como otras organizaciones campesinas, iniciarán jornadas de defensa y pugnarán por incremento del presupuesto destinado al campo para programas sociales, productivos, indemnizaciones y finiquitos agrarios, entre otros, luchas que hacemos nuestras y en que nos manifestaremos con nuestros contingentes, pues se trata de una causa justa.
Sin embargo, le mencionamos que los recursos dirigidos al campo en su gran mayoría se destinan a las organizaciones firmantes, lo que es injusto, pues a ellas se les da prioridad en los destinos de los recursos sin importar los criterios de equidad.
Este simple hecho que parece lógico para las organizaciones firmantes es símbolo de descomposición democrática, parcialidad, corporativismo, pues se corre el peligro de crear nuevos cacicazgos, fortalecidos con el erario, pues no existe claridad en la asignación de recursos, ni mucho menos en la justificación a quiénes se entregan los recursos económicos o en especie, ejemplos tenemos en Oaxaca, Veracruz, Guanajuato y San Luis Potosí, y seguramente en otros estados.
Existen reglas de operación, pero las organizaciones favorecidas forman parte de esos comités, seguramente son juez y parte.
Este comentario es fundamentalmente para que se socialicen los recursos y la dependencias de gobierno publiquen qué prerrogativas tienen las organizaciones firmantes y en qué lugares se resuelven conflictos agrarios, pues las personas que supuestamente deben ser beneficiadas en muchas ocasiones lo ignoran, por lo que resultan defraudadas o pierden sus posesiones por invasiones.
Alfredo Nájera Sánchez, secretario de Asuntos Agrarios de la Unión General de Obreros y Campesinos de México
Refiere atropello de Ticketmaster
Señora directora: Hace unos días adquirimos boletos para la presentación del Cirque Du Soleil para el 28 de octubre a las 17 horas. Se publicitó que si se pagaba con la tarjeta VISA se haría un descuento de 100 pesos por boleto. Sin embargo, al comprar cinco entradas vía Ticketmaster, la señorita Paola Samayoa me informó que la promoción ya no estaba vigente después de cuestionarme en dónde había visto esa información. Me aseguró que no hay ningún tipo de descuento y me invitó a pagar con cualquier otra tarjeta de crédito, situación que acepté y pagué con American Express.
Les informé de esto a otras amistades que también asistirían en fechas posteriores y que también deseaban tener sus descuento con VISA, los cuales optaron por comprarlos con otra forma de pago. Sin embargo, el viernes 28 estas personas me indicaron que en el periódico continuaban anunciando el descuento. Hablé inmediatamente a Ticketmaster y le comuniqué esta situación al señor Cristian Estrada.
Aceptó que la promoción estaba vigente y que me dieron una mala información, pero me refirió que por políticas internas no se puede cancelar o modificar la forma de pago, que puedo utilizar los boletos sin problemas y levantar una queja, se comprometió a darme noticias al día siguiente, sábado 29. El primero de noviembre pedí hablar con el supervisor de atención a clientes, Jesús Villalobos, y aceptó que la señorita Paola reconoció haberse equivocado y haber brindado la información errónea, aceptó que es un error de Ticketmaster, pero dijo que no se puede hacer nada. Es decir, tenemos que pagar por sus errores.
¿Quién posee la concesión de Ticketmaster? Son perfectamente conocidos los abusos y las comisiones desmedidas, cargos por servicio de más de 10 por ciento y cuota de elaboración que no regresan si se cancelan los espectáculos. Es necesario que las autoridades respectivas supervisen rigurosamente a este tipo de establecimientos que tienen la concesión única en el país y que con actitudes prepotentes y gangsteriles se hacen ricos a costa del pueblo.
Atentamente
Paulín Chávez Rojas