El Correo Ilustrado
El valor social de la cooperativa Pascual
Señora directora: Solicitamos que publique esta carta, dirigida a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación:
Nos manifestamos ante ustedes sobre este caso, pues queremos que tengan en cuenta los siguientes puntos para la toma de cualquier decisión:
La cooperativa Pascual es un logro de los trabajadores, obtenido por el apoyo directo y constante de los habitantes de este país.
Es la empresa refresquera mexicana más importante frente al monopolio de las trasnacionales de bebidas embotelladas. Es decir, Pascual atrae divisas en vez de extraer capital.
La malnutrición de los mexicanos se ha agudizado con la propagación de la industria refresquera. Sin embargo, los refrescos Pascual son los únicos de distribución masiva que contienen pulpa de fruta. Un análisis nutricional basta para constatar que su aporte está por encima de los refrescos de las trasnacionales. Además, compra la fruta a productores nacionales y exporta pulpa: apoya al campo mexicano.
Pascual elabora sus bebidas con azúcar de caña y no con fructosa procedente de maíz transgénico importado. Es decir, apoya a los cañeros del país.
La expropiación del predio en el que están las instalaciones fue justificada como un acto que satisfacía una necesidad de bien común. No procede que la Corte acepte una revisión de la legitimidad de dicho acto sólo porque la heredera del ex propietario dice no estar de acuerdo y rechaza una compensación económica.
Por estas y otras razones es claro el interés social que esta empresa tiene para México. El interés social es un valor que esperamos exista entre ustedes, señores ministros. Los invitamos a que muestren que este gobierno no es únicamente de y para empresarios, sino también un gobierno que vela por los intereses públicos y el bien colectivo.
Greenpeace México, RAPAM, GEA, Promotores y Comunicadores Ambientales, Maderas del Pueblo del Sureste, Comité Estatal de Sistema Producto Café de Oaxaca, Unión de Grupos Ambientalistas y Fernando Bahena (Cenapros-Inifap)
Protesta por encarcelamiento del editor Fernando Valdés
Señora directora: Leer las resoluciones de esa encumbrada camarilla denominada jueces me lleva a reacciones de asco y rabia. Cuando la justicia decide la exoneración de delincuentes, políticos corruptos y actores de asesinatos masivos en 1968 y 1971, cuando libera de las cargas económicas a los banqueros y deja caer el monto histórico de una deuda sobre los ciudadanos, cuando dispone de aparentes fideicomisos que no son más que millonarias prebendas para ellos mismos, el asco y la rabia se acumulan. Y de ahí nace el sentimiento de impotencia, intensamente frustrado, atado de manos y pies, por el aparato, casi de torturas, el cual no pocas veces tiene resoluciones basadas en decisiones de clase.
El dinero manda sobre la justicia. La ceguera de la misma triunfa, y esto lo podemos constatar, entre tantos casos, en esos juicios emitidos de culpabilidad para campesinos defensores de la ecología, o el posible encierro de un poeta tabasqueño por un poema, cuya temática desagrada a los simbólicos togados; una justicia que crea exasperación social cada vez más creciente. Pero la última gota de acíbar que he recibido es el encarcelamiento del editor Fernando Valdés. Con base en una presunta acusación de piratería, un editor de la valía del mismo, al cual conozco como excelente editor desde hace más de 20 años, se encuentra preso en el Reclusorio Norte, como un delincuente. Esta justicia que lo encarcela sin probar acusación alguna es parte de un sistema basado en el influyentismo, en el sufrimiento de las personas. Esta política de atacar a personas que expresan sus ideas o son difusores de la misma son de gran peligro, parte de una estructura disfrazada de democracia formal, pero la cual es todavía un componente sustancial del autoritarismo, una justicia que ataca a la sociedad.
Por otro lado, expreso mi asombro ante la actitud pasiva del gremio de editores, puesto que no defender la libertad de Valdés la aceptación para un posible mañana de ataques injustos a otros editores. Reitero, hay que exigir la libertad de Fernando Valdés.
Eduardo Mosches, director de la revista Blanco Móvil, coordinador editorial de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México
Lamenta que la calidad educativa no abarque a todas las instituciones
Señora directora: Qué bueno saber que tenemos escuelas de calidad en México, pero en la mayoría de los estados no contamos con instituciones de esa categoría. Entonces, cómo vanagloriarnos de la calidad que no llega ni a la décima parte de los jóvenes. Nos tenemos que conformar con centros educativos que sólo son paredes, por que no hay maestros bien preparados. Es horrible darnos cuenta de que para poder ser partícipes de ese beneficio debemos mudarnos. ¿Cómo hacer para unificar la calidad de la máxima casa de estudios en todos los centros de nivel superior del país? (Carta resumida.)
Luna Marán
Disculpas a la comunidad judía
Señora directora: Agradeceré la publicación de esta disculpa pública a la comunidad judía en México.
El 9 de octubre pasado respondí en este mismo espacio un artículo de Soledad Loaeza, donde dije a la escritora que no existía ninguna corriente sindical antisemita, pero que efectivamente yo había mostrado una esvástica tomada de la película Amén (2002) de Constatin Costa-Gavras. De esa carta se ha derivado un señalamiento erróneo en el sentido de que yo pinté símbolos que atentan contra la integridad de la comunidad judía.
Dicha carta ocasionó una confusión contraria a su objetivo y que, por desgracia, fue aprovechada por grupos ajenos a los movimientos políticos y sociales que se vivían.
Me explico: mucho tiempo antes de la aparición misteriosa de la pintas -que no pinté yo- en el edificio del IMSS de Reforma 476, el 13 de septiembre, en la comparecencia del doctor Santiago Levy con motivo de la glosa del Informe presidencial 2005, ante la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados, en una manifestación personal, bajo mi propia iniciativa, mostré una cartulina con la reproducción de la portada del dvd (Videomax) de la película Amén, con las frases: "Por los siglos de los siglos... Amén. Una película de Costa-Gavras. ¡Seguro ya la viste, Levy!" Al final de cuentas me la quitaron por órdenes de las autoridades de la Cámara de Diputados. La foto de la cartulina fue publicada al siguiente día en algunos medios.
Sin embargo, si la comunidad judía se sintió ofendida por los hechos arriba narrados, con profunda humildad deseo aclarar a esta comunidad que el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social y un servidor jamás han pretendido ni pretenden realizar actos irracionales contra algún tipo de religión o grupo étnico.
Por todo lo anterior, a los miembros de la comunidad judía debo y pido públicamente que acepten mi reiterada y más sentida disculpa. La disculpa de un ciudadano mexicano que involuntariamente los ofendió y agravió.
Bulmaro Guerrero Cárdenas
Invitación
Diálogos de creadores
Diálogos entre creadores y público en el contexto de la Sexta Declaración de la Selva Lacandona. La cita es hoy a las 11 horas en el Café de la Red, Medellín 33, entre Puebla y Sinaloa, Metro Insurgentes. Teléfono 5208 4946. Convoca el Colectivo Kurpiteecha.