LOS NUEVOS RICOS

Las elecciones de 2006 tendrán un costo general de 12 mil 920 millones de pesos, de los cuales corresponderán a los partidos cuatro mil 926 millones; sin embargo, la falta de una regulación de las precampañas y la doble contabilidad que éstos llevan para el proceso podrían ocasionar que se supere esa cifra.

Hasta el 6 de octubre, fecha de inicio formal de los comicios, los partidos gastaron 800 millones de pesos en sus precampañas únicamente en anuncios de radio y televisión. La cifra representa 16 por ciento de las prerrogativas a partidos políticos y poco más de la mitad de los mil 500 millones de pesos involucrados en el Pemexgate, por el cual el Partido Revolucionario Institucional (PRI) recibió una multa de igual monto.

En este periodo de precampañas que inició en abril, el PRI (Tucom y Roberto Madrazo) gastó 403 millones de pesos; el Partido Acción Nacional (Santiago Creel, Felipe Calderón y Alberto Cárdenas) 219 millones; el Partido Verde (Bernardo de la Garza) 162 millones; Víctor González Torres 13 millones; el Partido de la Revolución Democrática (Andrés Manuel López Obrador) 5.5 millones, y Jorge Castañeda 844 mil pesos, según la empresa Verificación y Monitoreo.

A esta cifra se deben agregar los gastos en medios electrónicos de Convergencia, el PT, Alternativa Socialdemócrata Campesina y Nueva Alianza, además de los gastos operativos personal, capacitación, promoción por otros medios y atención ciudadana de todos los partidos que contenderán en 2006.

EL COSTO DEL IFE

De los 6 mil 932 millones de pesos del gasto operativo de los comicios de 2006 la mitad será para pagar salarios, bonos y otras compensaciones de la burocracia del IFE.
En 2005 se asignaron al IFE 6 mil 200 millones de pesos; de ellos, 2 mil 900 se destinarán al gasto corriente, 2 mil 115 millones a los partidos y mil 185 en difusión, proyectos de modernización y credenciales.
El sueldo mensual de cada uno de los nueve consejeros es de 155 mil pesos. El ingreso puede llegar a 224 mil pesos con: bonos y percepciones extras (un vehículo cada año, 9 mil pesos para comidas al mes y 4 mil para celular).
La oficina del consejero presidente, Luis Carlos Ugalde, gasta 800 mil pesos mensuales en 11 asesores y secretarios. Tiene coordinador administrativo, de asesores y un secretario particular (cada uno gana 100 mil pesos más 8 mil 100 pesos para comidas y 3 mil 200 para celular.
Ante la posibilidad de reducir su salario y el de los consejeros, Ugalde se limitó a señalar que se requería reformar la ley.

Arturo Sánchez, consejero del Instituto Federal Electoral (IFE), calcula que los partidos gastarán 114 millones de dólares en promoción en medios de información (unos mil 200 millones de pesos); aunque IXE Casa de Bolsa cifra en 133 millones de dólares (mil 400 millones de pesos) el pastel que se repartirán televisión, radio y prensa escrita.

De acuerdo con el Grupo Financiero Santander, Televisa concentrará 70 por ciento de ese monto (91 millones de dólares), lo que ha generado una suerte de especulación en la bolsa, generada por esta institución, que recomienda comprar desde ahora acciones de la televisora.

Este pronóstico lo comparte IXE, que en un reporte reciente asegura que las elecciones de 2006 elevarán 17 por ciento los ingresos de la televisora y 42 por ciento sus utilidades. Este repunte no incluye, por supuesto, los ingresos por precampañas.

En los comicios de 2003, tres cuartas partes de la propaganda (unos 50 millones de dólares) las retuvieron Televisa y Tv Azteca; 114 millones fueron invertidos en radio y 2.5 millones en periódicos y revistas.

Televisa y Tv Azteca niegan, sin embargo, que sean las principales beneficiarias de la propaganda electoral. Javier Tejado, director general del Grupo Televisa, y Javier Medina, director de enlace legislativo de Tv Azteca, aseguran que los partidos gastan en promedio 30 o 40 por ciento de sus prerrogativas, y no 60 o 70 por ciento, como asegura Sánchez.

De acuerdo con Medina, la televisión comercial sólo se queda con 288 millones de pesos del pastel electoral, de los cuales Tv Azteca se beneficiaría con 8 millones de pesos (3 por ciento) y Televisa con el resto, 280 millones.

Para el consejero Sánchez los comicios son un negocio tan rentable para las televisoras que podrían facturar ingresos semejantes a los de la transmisión del campeonato mundial de futbol, que estará en curso cuando se celebren las elecciones, el próximo 2 de julio.

La otra parte de la campaña, en las calles, lejos de la radiodifusión, también tendrá un costo que aún no se documenta.

Puede calcularse que un candidato gastaría unos 250 mil pesos en un mitin al que asistieran 25 mil personas, con los siguientes costos: concierto con cantante, 70 mil pesos; 25 mil carteles, 35 mil pesos; 25 mil camisetas, 100 mil pesos; equipo de sonido y sillería, 50 mil pesos.

Si el candidato desea un espot de 30 segundos con imágenes de esa concentración, el costo se elevaría cinco mil 600 dólares (60 mil 500 pesos) o 16 mil dólares (324 mil pesos) si contrata actores, derechos de transmisión y sistema satelital, de acuerdo con las tarifas de la empresa Video Film y Television World México.

De acuerdo con información del IFE, el proceso electoral costará 12 mil 920 millones de pesos, de los cuales seis mil 932 corresponderán a gasto operativo; cuatro mil 926 millones a prerrogativas de partidos, y mil 62 millones al financiamiento del voto en el exterior.

El gasto no es sustancialmente mayor al de 2000 (11 mil 462 millones); incluso el costo de cada voto disminuirá. En 2000 cada sufragio tuvo un valor promedio de 289 pesos, en 2003 de 444 pesos y en 2006 de 276 pesos (el voto en el extranjero costará entre ocho y 10 dólares). En general, en cada elección federal se invierte uno por ciento del producto interno bruto; ahora será 0.63 por ciento.

Sin embargo, el costo podrá elevarse a tal grado que los recursos que se invierten al margen del proceso electoral formal podrían igualar o superar el financiamiento oficial.

Hasta ahora se han documentado 800 millones de pesos, pero a esta cifra habrá que agregar el gasto en promoción de los candidatos del Distrito Federal, los equipos de las 512 fórmulas para elegir candidatos a senadores, mil 600 candidatos a diputados de representación proporcional y 380 sustitutos. Asimismo, los 490 millones de pesos que los particulares pueden donar a los partidos (10 por ciento de las prerrogativas) y 40 millones que el gobierno federal invertirá en el proceso de observación y vigilancia de los comicios.

Para Eduardo Huchim, consejero del Instituto Electoral del Distrito Federal, el financiamiento es "escandaloso", pues los 12 mil 920 millones de pesos superarán el gasto conjunto de la Presidencia de la República, el Senado, la Cámara de Diputados, la Auditoría Superior de la Federación y la Suprema Corte, que este año es de 10.7 mil millones.

El monto también representa 40 por ciento del programa Oportunidades, la principal estrategia contra la pobreza del gobierno federal; 72 por ciento del Programa de Apoyo para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas, y cinco veces más de los excedentes petroleros que el gobierno federal adelantó a Chiapas, Veracruz, Oaxaca, Puebla y Guerrero para hacer frente a los estragos del huracán Stan §