Superó 1-0 a los Astros de Houston, a los que barrió en cuatro juegos
Acabó la sequía y Medias Blancas ganó su primera Serie Mundial desde 1917
El venezolano Ozzie Guillén, primer mánager latino en conquistarla
Jermaine Dye, el más valioso
Ampliar la imagen
Los jugadores de Chicago festejan jubilosos la conquista de su primer t�lo en el Cl�co de Octubre, despu�de 88 a�de espera FOTO Reuters
Foto: Reuters
Houston, 26 de octubre. Con certero pitcheo del venezolano Fredy García y un sencillo de oro de Jermaine Dye, Medias Blancas de Chicago venció 1-0 a los Astros de Houston, para barrer a la escuadra texana en la Serie Mundial que se adjudicó por blanqueada en cuatro juegos.
El triunfo tuvo repercusiones para Latinoamérica, pues por primera vez un hispano, como lo es el venezolano Oswaldo (Ozzie) Guillén, manejador de Medias Blancas, conduce a un equipo a la mítica corona del orbe.
Antes del partido se rindió un reconocimiento a las valiosas aportaciones que América Latina ha dado a las Ligas Mayores. Por México figuró el zurdo sonorense Fernando Valenzuela, quien militó principalmente con los Dodgers de Los Angeles.
Con la victoria, la novena de la Ciudad de los Vientos terminó una sequía de 88 años sin saborear las mieles del triunfo, la segunda más larga después de la de Cachorros de Chicago que no gana desde hace 97 años.
Fue la quinta ocasión en que la serie, que define el campeonato de Estados Unidos, termina en cuatro juegos y la segunda en que ocurre consecutivamente, ya que el año pasado Medias Rojas de Bostón dispuso de San Luis en cuatro partidos.
En la serie de este año dos partidos se definieron por diferencia de una carrera y los dos restantes la ventaja del triunfador fue de apenas dos carreras.
De los 12 juegos de postemporada disputados, Chicago, monarca de la división central de la Liga Americana, únicamente perdió uno, el primero de los playoffs ante Serafines de Anaheim, cuando cayó 3-2.
El partido resultó un cerrado duelo de serpentinas por los primeros siete episodios, en los que García, a la postre el pítcher triunfador, retiró tres de esas entradas en orden, con siete ponches incluidos.
Por su parte, el derecho Brandon Backe, abridor de Houston, fue un digno rival, pues recetó también siete chocolates y retiró igualmente tres capítulos en orden .
Dye fue designado el jugador más valioso de la serie y se adjudicó, además de un trofeo, un automóvil último modelo.
La única carrera del partido cayó en el octavo rollo que abrió Willie Harris, emergente por el pítcher García, con sencillo al prado izquierdo.
Podsednik, otro de los héroes
Scott Podsednik, héroe del segundo juego, lo adelantó con rodado por la loma. El japonés Iguchi dio rodado por la segunda y Harris ancló en la antesala, para que enseguida llegara Dye, quien sacó una línea que se fue al jardín central y permitió la anotación de Harris.
Houston dejó a dos embasadaos en el cierre de esa entrada, cuando dramáticamente Vizcaíno sacó un roletazo por la tercera base para el tercer out.
En la novena, los Astros volvieron a entusiasmar a sus aficionados reunidos en el parque Minute Maid, quienes presenciaban apenas el segundo juego de Serie Mundial en la historia de Texas.
Jason Lane abrió el turno con sencillo corto al central y Brad Ausmus se sacrificó para adelantarlo a segunda ante los lanzamientos del cerrador Bobby Jenks.
El emergente Chris Burke murió en elevado de foul por las tribunas de la raya de la tercera base, en jugada muy riñonuda del paracorto dominicano de Chicago, José Uribe, quien se tiró un clavado a las gradas para atrapar la esférica.
El emergente Orlando Palmeiro fue el último out en rodado por las paradas cortas que Uribe tomó y reviró hacia Paul Konerko, en la inicial para la postrera jugada de la serie. Una acción muy cerrada.
TIRILLA