El pillaje ha desaparecido, asegura la dependencia
SG: no se suspenderán garantías en Cancún
La Secretaría de Gobernación (SG) confirmó ayer que no se suspenderán las garantías individuales en Cancún, devastada por el huracán Wilma y asolada por saqueadores que rebasaron a las fuerzas de seguridad tras el desastre. La dependencia aseguró que la situación está bajo control y tiende a normalizarse, además de que, subrayó, el pillaje ha desaparecido.
En Ottawa, Canadá, días después del paso del meteoro, el secretario de Salud, Julio Frenk Mora -participante en una reunión de alto nivel de ministros de Salud- "anticipó" su regreso a México para "ponerse al frente" de las operaciones sanitarias en Quintana Roo y Yucatán, y "atender gran cantidad de asuntos" relacionados con la prevención de brotes epidémicos, la atención médica a la población afectada, la vacunación preventiva y el control de mosquitos transmisores del dengue mediante fumigaciones masivas.
La Secretaría de Salud envió ayer 7 mil vacunas pediátricas, 15 mil contra la hepatitis A, 30 mil contra el tétanos y 10 mil contra la influenza.
Por su parte, la Secretaría de la Defensa Nacional ha puesto en marcha una cocina comunitaria para suministrar 3 mil raciones por día.
Gobernación informó que en Quintana Roo continúan abiertos 131 refugios temporales que atienden a 37 mil personas, mientras en Yucatán operan otros cuatro para dar servicio a mil 829 afectados por el huracán.
En tanto, el vicepresidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano y arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, mencionó que los reportes oficiales hablan de siete muertos, 700 mil damnificados y 35 mil turistas atrapados en los refugios de Yucatán y Quintana Roo, además de que faltan alimentos, agua, luz, teléfono y hay cuantiosos daños a inmuebles.
En una carta llama a fortalecer la solidaridad con las víctimas de Wilma y lamenta que la situación se dificulte por los saqueos en las zonas de desastres. Mientras, el equipo de emergencias de Cáritas Mexicana, como parte de la Comisión Episcopal de Pastoral Social (CEPS), evalúa los daños causados por el huracán.
Por su parte, el arzobispo Norberto Rivera Carrera condenó los desórdenes y saqueos en las zonas afectadas: "Son un crimen, más en estas condiciones. Creo que después de la desgracia no hay que abusar de los que han caído".
Invitó a canalizar la ayuda mediante las instancias oficialmente reconocidas para ello, como la Cruz Roja Mexicana o Cáritas, para asegurar que los bienes lleguen a sus destinatarios.
La CEPS anunció que gestiona con Catholic Relief Services una ayuda económica para los damnificados.
Por su parte, por instrucciones del presidente Vicente Fox Quesada, la secretaria de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota, supervisó ayer las tareas de abasto en las zonas afectadas de Cancún, Isla Mujeres y Playa del Carmen, con el propósito de garantizar que los apoyos que otorga el gobierno federal lleguen de manera oportuna a todas las familias afectadas.
En un comunicado la Sedeso informó que la funcionaria constató que existen inventarios suficientes de alimentos para hacer frente a la contingencia y garantizó que el gobierno "no escatimará esfuerzos para atender oportunamente a quienes más lo necesiten".
Además exhortó a las autoridades estatales y municipales a reforzar la colaboración para seguir dando respuestas eficientes a la población que les permitan el pronto retorno a la normalidad. En Isla Mujeres sostuvo que, en breve, los damnificados contarán con cocinas comunitarias, que serán operadas por el Ejército Mexicano para otorgar a la población comida caliente tres veces al día.
Diconsa, en tanto, entregó ayer 20 mil despensas, con lo cual suman 80 mil 500 las distribuidas entre los afectados desde el inicio de la emergencia; mañana se hará llegar otras 19 mil 500.