Considera Banamex positivos los cambios en Petróleos Mexicanos
Se obtendrán 2 mil mdd adicionales
El nuevo régimen fiscal para Petróleos Mexicanos (Pemex) le permitirá obtener ingresos adicionales, desde su primer año de vigencia, cercanos a 2 mil millones de dólares considerando un precio promedio de la mezcla mexicana de exportación de 31.5 dólares por barril, estimó el grupo financiero Banamex, subsidiaria del estadunidense Citigroup.
Consideró positivo ese cambio: "Es un paso inicial en una reforma que, aunque incremental, va en la dirección correcta y es necesaria".
Sin embargo, para la dirección general de Pemex, encabezada por Luis Ramírez Corzo, el nuevo régimen fiscal no soluciona la problemática financiera de la empresa, por lo que insistió en contar con una mayor autonomía de gestión, la integración de miembros independientes al consejo de administración y comités de auditoría, evaluación, planeación y finanzas, así como la emisión de títulos "con derechos económicos" ligados al desempeño de la empresa.
Pemex aporta al fisco mexicano alrededor de 110 por ciento de sus utilidades o más de 60 por ciento de sus ventas totales para solventar aproximadamente 35 por ciento del gasto total del sector público. De esta manera, Pemex se ha convertido en la empresa petrolera más endeudada del mundo, con adeudo por 46 mil millones de dólares y pasivos totales de 89 mil millones de dólares a junio de 2005.
Bajo la apreciación de Banamex, esta iniciativa que fue aprobada en principio en la Cámara de Diputados, "pronto será turnada a la Cámara de Senadores, en la que pareciera ser que no habrá cambios".
El cambio del régimen fiscal para Pemex, señaló el intermediario financiero en su último reporte dado a conocer este fin de semana, constituye una primera etapa de un régimen de transición que le permitirá a Pemex avanzar hacia una empresa con mayor eficiencia, ya que se establecen reglas duraderas respecto de los ingresos de que dispondrá para su desarrollo y crecimiento.
Sin embargo, bajo la perspectiva de la dirección general de Pemex, este cambio constituiría un régimen fiscal de transición, que no soluciona la problemática financiera de la empresa, no obstante, su adopción constituye un primer paso, indispensable, para estar en capacidad de instrumentar, posteriormente, un régimen fiscal competitivo.
Para los especialistas de Banamex la forma como ha sido establecido este nuevo régimen nos facilita a los mexicanos saber cuánto entrega Pemex a la Federación, a los estados y municipios; cómo se distribuyen estos dineros y eventualmente más adelante saber en qué los emplean, para así evaluar el aprovechamiento de dichos recursos.
Explicó que ahora la empresa queda obligada a tener un registro de los costos y gastos de exploración de cada uno de los campos de extracción de petróleo crudo y gas natural no asociado, así como toda la información que lo sustente, además de que permitirá justificar y adoptar las medidas necesarias para hacer más eficiente a la empresa, dentro de las cuales no descartamos áreas en las que el sector privado pueda apoyar.
Entre los puntos a destacar del nuevo régimen fiscal que se aplicará a Pemex a partir del próximo año sobresale la certidumbre en el pago de derechos de Pemex a la Federación; el establecimiento de un fondo de estabilización petrolera, deducibilidad en seis años de las inversiones en desarrollo y explotación de petróleo crudo y gas natural.
Además, la deducibilidad de 50 centavos de dólar por cada millar de pie cúbico de gas natural no asociado extraído adicional al volumen de extracción que se registre para 2006; así como la obligación de Pemex de entregar recursos patrimoniales al Fondo de Investigación Científica y Tecnológica y a la Auditoría Superior de la Federación.
El nuevo régimen establece otorgar parte de los recursos del Fondo de Estabilización Petrolera a la Federación para inversiones en infraestructura primaria en 2006. Asimismo, se proporcionará seguridad jurídica a las entidades federativas sobre los ingresos que deben recibir de esta fuente.