Considerará "críticas" del grupo disidente recién creado
Rechaza Anaya que el PT se encamine a la fractura
Desechan recurso de Flores Rodríguez contra su expulsión
El dirigente del Partido del Trabajo, Alberto Anaya, dio ayer la bienvenida a la corriente recién surgida en ese instituto político, la cual cuestiona su gestión. Dijo que las críticas que ha emitido serán tomadas en consideración y rechazó que se encamine a la fractura, luego de refutar acusaciones de irregularidades que pudieran lesionar la vida partidista.
De manera particular, negó anomalías en el proceso de aprobación y registro de los nuevos estatutos del instituto político, pero sus opositores afirman que las hubo y que, incluso, se convirtieron en una de las causas que dieron origen al surgimiento de la nueva fuerza.
De acuerdo con integrantes del grupo disidente -encabezado por José Narro, el senador Marcos Cruz y Oscar González-, son varias las inconformidades que hay en contra de los estatutos, pero quizá las más sentidas son que el documento no fue consensuado entre los integrantes de la dirigencia colegiada del partido antes de ser enviado al Instituto Federal Electoral (IFE) para su registro, que se falsificaron firmas para poder cumplir el requisito de tener las rúbricas de los principales líderes y que se propicia la centralización del poder en una persona, lo que consideran rompe con el equilibrio histórico que se mantenía entre las principales cabezas del petismo.
Si bien el congreso nacional del PT dio un voto de confianza para que la comisión encargada de elaborar los estatutos consensuara las modificaciones que se presentarían al IFE, tal mandato no se acató y se hicieron cambios que no tenían el apoyo de diversos dirigentes y militantes, argumentan.
Entrevistado sobre el debate interno en el PT, Alberto Anaya negó que se hayan cometido irregularidades en el envío y registro de los estatutos ante el órgano electoral.
De hecho, aseguró que durante el congreso nacional del partido todos votaron en favor del documento y que un notario público dio fe de ello, y así lo consignó en el acta constitutiva.
-Hay señalamientos de que los estatutos no fueron consensuados y que su articulado no corresponde a los planteamientos vertidos por diversos dirigentes.
-En todo caso, que demanden al notario. Además, todas las cosas fueron avaladas por el congreso, insistió.
-La nueva corriente amenaza con acudir al tribunal electoral para impugnar los estatutos.
-Como ciudadanos y militantes en un país que permite la libre expresión, se puede ejercer ese derecho, enfatizó.
Alberto Anaya evadió responder abiertamente a las críticas en su contra; se concretó a señalar que se van a tomar en cuenta y que son bienvenidas.
En relación con las versiones de que busca negociar una alianza electoral con el PRI, respondió que, en definitiva, el congreso aprobó la promoción de un frente de centro izquierda y que el partido está en esa tesitura.
Si bien reconoció haberse reunido con Roberto Madrazo cuando éste era dirigente priísta, aseguró que fue como parte de las negociaciones que se llevaron a cabo para establecer alianzas electorales en diversos estados del país durante los comicios del año pasado. Pero sólo en esa ocasión y a petición de José Narro y Marcos Cruz, aseguró.
-Pero, ¿es cierto que estaría interesado en una alianza con el PRI, sobre todo después de que Madrazo manifestó públicamente que buscaría negociar con el PT? -se le insistió.
-En el partido existen corrientes de opinión, no sólo la de ellos. Pero el mandato del congreso es la construcción del frente de centro izquierda y buscar el mejor candidato que abandere este esfuerzo.
-Todo indica que la construcción del bloque no avanza.
-El PRD, Convergencia, sindicatos y organizaciones sociales han manifestado su interés de crear el frente, pero su establecimiento pasa por acuerdos entre los partidos. Por ejemplo, el PRD, con ocho corrientes internas, tiene que construir sus propios acuerdos. Pero hay tiempo todavía. Se trabaja en el tema y vamos a poner el mejor de nuestros esfuerzos, concluyó.
La entrevista con Alberto Anaya ocurrió ayer en el contexto de una reunión del Consejo Político Nacional del PT, donde se desechó el recurso de apelación interpuesto por el veracruzano Ezequiel Flores Rodríguez en contra de su expulsión definitiva del partido. El punto fue aprobado por 112 votos en favor y 25 en contra, luego de un acalorado debate en el que se enfrentaron los seguidores de Anaya y los integrantes de la nueva corriente.
La discusión sobre este tema se realizó por mandato del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, instancia a la que volverá a acudir Flores Rodríguez por no haber elementos para la expulsión, informó su esposa Claudia Serapio Franco.