La segunda en 35 días; ha realizado las operaciones más grandes en la historia de la BMV

Entra a la bolsa nueva empresa de Slim; captaría $29 mil millones

Lo que obtendrá el empresario duplica lo que ocho corporativos se allegaron este año

Exceso de liquidez por acumulación de recursos de los fondos de retiro de trabajadores

VICTOR CARDOSO

A partir de ayer, la empresa Carso Infraestructura y Construcción, SA (CICSA), de Carlos Slim Helú, colocó en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) acciones con un valor de 4 mil 712 millones de pesos .

Así, en menos de 35 días, el empresario habrá registrado dos nuevas empresas en la BMV, lo que le permitirá tener acceso a recursos económicos frescos por alrededor de 29 mil millones de pesos. Estas dos operaciones son las más altas que se han registrado en los 112 años de historia del mercado de valores del país.

Lo que obtendrá el empresario representa casi el doble de los 15 mil 530 millones de pesos que otros ocho corporativos tuvieron con la colocación de sus acciones en el mercado bursátil en lo que va de este año.

La decena de nuevas ofertas de acciones colocadas en la BMV forma parte de una estrategia empresarial para aprovechar el exceso de liquidez del mercado bursátil generada principalmente por los más de 600 mil millones de pesos acumulados en los fondos de pensiones de los trabajadores mexicanos, los cuales están mayoritariamente concentrados en bonos de deuda del gobierno federal.

Apetito voraz

Los crecientes recursos económicos que concentran las sociedades de inversión especializadas en fondos para el retiro (Siefore) se encuentran mayoritariamente invertidos en bonos comercializados en el mercado de valores. De esos fondos, hasta septiembre pasado, se habían adquirido 321 mil 922 millones de pesos en bonos de deuda del gobierno federal, mientras que poco más de 173 mil millones adicionales estaban invertidos en papeles de empresas privadas.

En la búsqueda de una diversificación de su cartera, las Siefore han incrementado sustancialmente el monto de sus recursos a invertir y son ya los principales tenedores de deuda privada, según reportes del grupo financiero Ixe.

Para capitalizar esa situación entre febrero y octubre, ocho grandes corporativos colocaron parte de sus acciones en el mercado de valores, lo que representó una captación conjunta de 15 mil 530.17 millones de pesos. La mayor operación fue la realizada por Cementos Mexicanos (Cemex) por 4 mil 338 millones; le siguió la de Fomento Económico Mexicano (controladora de las embotelladoras Coca Cola), por 3 mil 592.8 millones; la de Industrias CH, por 2 mil 7.5 millones; la de la constructora ICA, de mil 590.4 millones; la de Mexichem, de mil 319.6 millones. SARE Holding colocó 831.6 millones de pesos, y Qualitas Compañía de Seguros obtuvo 735.6 millones.

Pero ninguna de las anteriores operaciones se compara con el avasallante proyecto empresarial de Carlos Slim Helú, quien apenas el pasado 15 de septiembre, en plenas fiestas patrias lanzó a la BMV la cotización accionaria de la empresa IDEAL (Impulsora del Desarrollo y el Empleo en América Latina) y, a partir de hoy, la de CICSA.

A 35 días de cotizarse en el mercado de valores, IDEAL tiene poco más de 3 mil millones de acciones en circulación, las cuales alcanzan un valor en el mercado de 24 mil 301.2 millones de pesos, mientras que CICSA espera captar 4 mil 712 millones.

Ambos corporativos forman una pinza con los que Slim Helú busca posicionarse en la competencia por los proyectos de infraestructura que impulsan los gobiernos de países latinoamericanos.

Sólo para tener una dimensión del tamaño de los mercados que buscan IDEAL y CICSA, baste recordar que, según estimaciones del Banco Mundial, los países en desarrollo requieren invertir más de 120 mil millones de dólares anuales hasta 2010 en proyectos de infraestructura. En el caso particular de México, el gobierno federal tiene en puerta licitaciones de obras por un valor cercano a los 17 mil millones de dólares entre este y el próximo año.

Aunque cuenta con apenas seis años de operación, CICSA ya tiene su historia: mediante el esquema de PPS (Proyectos de Prestación de Servicios) construye y administrará el inmueble de 90 mil metros cuadrados que albergará a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en el Centro Histórico.

Además ha construido y edifica plataformas marinas para Petróleos Mexicanos (Pemex); está encargada de la construcción de centros comerciales, unidades habitacionales y áreas recreativas en el estado de Veracruz (445 hectáreas) y Ciudad Nezahualcóyotl, estado de México, así como el libramiento norponiente de Toluca y la autopista Tepic-Villa Unión, cuyas inversiones rebasan los 2 mil 416 millones de pesos, y una planta de tratamiento de aguas residuales en Saltillo. Estos contratos de obra representan ventas sólo este año por 5 mil 115.8 millones de pesos.

Sus operaciones datan de 1999, como parte del Grupo Carso. Pero por medio de diversas adquisiciones y consolidaciones corporativas con las empresas de ese corporativo, CICSA concentró en sus activos y actividades todo aquello relacionado con la construcción de infraestructura, construcción civil, instalaciones para la industria de telecomunicaciones y la industria de bienes de capital, que incluye la construcción y desarrollo de proyectos para los sectores químico, petroquímico y petrolero.

Expansión

Con su lanzamiento al mercado de valores se tiene contemplado captar 4 mil 712 millones de pesos, recursos que serán utilizados en la expansión de las obras en proceso, así como el financiamiento de nuevos procesos de licitación de obra pública (como la construcción de la presa La Parota, de la Comisión Federal de Electricidad, con inversiones calculadas en unos 500 millones de dólares), así como la construcción de nuevas plataformas marinas para la explotación de petróleo que lanzará Pemex.

Algunas de sus subsidiarias son: Swecomex y Precitubo, especializadas en el sector químico y petrolero; CILSA, enfocada a la construcción y mantenimiento de obras de infraestructura y PC Constructores, encargada de obras civiles como la construcción de edificios corporativos, comerciales y de servicios, plantas y naves industriales, vivienda, centros comerciales, estacionamientos y obras de infraestructura, entre otras.