Mataron con obús en Bagdad a camarógrafo español
Dicta la justicia de España orden de captura contra tres militares de EU
Madrid, 19 de octubre. La justicia española dictó hoy orden de captura internacional contra tres militares estadunidenses sospechosos de participar en el ataque contra el hotel Palestina de Bagdad, que el 8 de abril de 2003 costó la vida al camarógrafo español José Couso, dijo una fuente judicial.
El juez Santiago Pedraz, de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española, emitió una orden de busca, captura y detención internacional con fines de extradición contra el sargento Thomas Gibson, el capitán Philip Wolford y el teniente coronel Philip de Camp, responsables del tanque que disparó un obús contra el hotel.
La orden de detención es para "asegurar la presencia de los imputados en el proceso (...) a vista de la nula cooperación judicial prestada por las autoridades estadunidenses para el esclarecimiento de los hechos", según el auto judicial.
El juez constata la falta de colaboración estadunidense "a pesar del vínculo de cooperación mutua entre España y aquel país, establecido por el Tratado de Asistencia Jurídica Mutua en materia penal, del 20 de septiembre de 1990".
Además de Couso, del canal de televisión privado Telecinco, el ataque causó la muerte del ucraniano Taras Protsyuk, camarógrafo de Reuters, e hirió a dos periodistas y un técnico de esa agencia británica.
El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, acogió "con prudencia y respeto" la decisión judicial, dijo el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, quien advirtió que "en ningún caso debería deducirse ningún tipo de consecuencia política de una decisión de una autoridad judicial" independiente.
"Tenemos buena relación con Estados Unidos y la cooperación judicial funciona", afirmó el mandatario.
Según el auto judicial, el 8 de abril de 2003, un tanque estadunidense disparó un proyectil contra el hotel a la altura de la planta 15, y Couso fue alcanzado por el impacto, falleciendo pocas horas después.
Recuerda que el 21 de abril de ese año se enviaron dos solicitudes de auxilio judicial a Estados Unidos sobre la documentación que "obrara" de los hechos investigados en los departamentos de Estado, de Defensa y de Justicia, sin que hasta ahora se haya recibido respuesta.
El ejército estadunidense estimó que "ninguna falta o negligencia fue cometida por las fuerzas de la coalición" ese día, pues el disparo iba dirigido contra alguien "en posición de tiro".