El director del INEE responde a la lógica de la tecnocracia y el control: expertos
Andanada de críticas a Martínez Rizo por su visión sobre educación superior
Enfatizan sobre beneficios económicos y humanos que genera el acceso a universidades
Académicos y representantes sindicales universitarios condenaron las declaraciones del director general del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), Felipe Martínez Rizo, quien afirmó que es "muchísimo" tener una cobertura de 23 por ciento en el nivel superior, al señalar que la visión del funcionario se inscribe en la lógica de la "tecnocracia y del control".
El investigador Angel Díaz Barriga expresó que incluso esa visión resulta "contradictoria con el proyecto que estos modernizadores" dicen ostentar: "es como si quisiéramos hacer un país de pobres", señaló.
Investigador del Centro de Estudios sobre la Universidad (Cesu) de la UNAM, Díaz Barriga, consideró que, para empezar, la medida que utilizan los funcionarios del gobierno federal es errónea, pues la cobertura la miden en función del ingreso, pero si la confrontáramos con el egreso, "nos desmayaríamos", porque apenas llegaría a 11.5 por ciento, y esto sin tomar en cuenta las tasas de titulación.
Entonces, no sólo es parte de una "insensibilidad política hacer este tipo de declaraciones, sino una contradicción de estos modernizadores que quieren tener una mejor educación y un mayor dominio de la información y, al mismo tiempo, se conforman con que sólo 23 de cada 100 accedan al nivel superior. Esto es garrafal", concluyó.
En este sentido, señaló: "habría que preguntarles si quieren un país de maquiladores con gente que tenga la mínima formación". Enfatizó que si no hay otros contenidos, otra mentalidad en los profesores y otras formas de enseñanza, no cambiará nada en el sistema.
Sin embargo, las autoridades no lo entienden y creen que porque publican resultados sobre el sector ya es suficiente. En este sentido, precisó que cuando se habla de una cultura de la evaluación se debe hablar de una cultura de la interpretación de resultados de la evaluación.
Díaz Barriga consideró lamentable que un ex rector, como Martínez Rizo, haga este tipo de señalamientos, sobre todo, cuando alrededor de 40 por ciento de los jóvenes no se les ofrece nada más que la calle, el ocio y caer en redes de la delincuencia.
Además, añadió, está comprobado que una personas con estudios de licenciatura además de acceder a mejores posibilidades de encontrar un empleo, también puede obtener un salario 25 por ciento superior a quienes carecen de esa prepararción.
Por otra parte, Héctor Fernández Rincón, académico de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), consideró que la visión de Martínez Rizo tiene que ver con una concepción de la educación superior que sólo responde a la lógica del mercado. "Para ellos, si los egresados se ajustan a los posibles empleos es correcto".
Sin embargo, en este esquema hay un mundo sin futuro para los jóvenes, porque "ni hay empleo ni universidad". Además, señaló que en las leyes del mercado se pierde de vista la lógica del sujeto, la formación del ser humano.
De tal manera que estas declaraciones se ubican en una visión de la tecnocracia y del control. "Para controlar a la sociedad no se necesitan sujetos formados", recordó.
Fernández Rincón añadió que Martínez Rizo es representante de un instituto relacionado con la evaluación, un instrumento que se ha utilizado no para mejorar la calidad sino para legalizar los recortes presupuestales.
En tanto, la secretaria general del Sindicato de Académicos de la UPN, Sandra Cantoral Uriza, enfatizó que estas aseveraciones se inscriben en un contexto de carencia de un proyecto social, educativo y con sentido humanista. No se podría esperar otras declaraciones de funcionarios cuya concepción del mundo y del hombre es que "ellos nacieron de forma divina. Por tanto, dan la espalda a los intereses de la mayoría, de tal forma que lo que han aprendido es justamente a traicionar esos intereses".
Durante su participación en el parlamento El binomio derecho y política, frente al desafío de 2006, efectuado en la Facultad de Derecho de la máxima casa de estudios, el coordinador general de Vinculación Académica y Tecnológica del IPN, Eduardo Meza Olvera, consideró necesario tener presente que la enseñanza superior es el instrumento esencial para impulsar el desarrollo nacional, la movilidad de los grupos sociales y las aspiraciones de formación individual.
Es indispensable que las instituciones de educación superior desarrollen la docencia e investigación en actividades que permitan al país "una trayectoria económica más alta y sostenida", señaló.
Carlos Arellano, profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM, destacó que el subdesarrollo en México sólo podrá superarse por medio del mejoramiento educativo y tecnológico de los individuos.
Contrario a lo expresado por el director general del INEE, Arellano García aseguró que se requiere atender "las necesidades de inversión en el capital humano para lograr potencial económico" en el país.
"México -subrayó- es un país subdesarrollado con permanente desventaja. Entre otras consecuencias, sufre la falta de tecnología, la fuga de cerebros y la carencia de infraestructura educativa."
En su oportunidad, el asesor de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados, Arturo Velasco, dijo que pese a los grandes retos que deben enfrentarse en ese rubro, en el gobierno del presidente Vicente Fox el gasto en Ciencia y Tecnología cayó tres décimas, al pasar de 0.43 a 0.40 por ciento del producto interno bruto.
Velasco Delgado mencionó que los contendientes a la Presidencia de la República "no sólo deben asegurar que continuará el apoyo a la generación de conocimiento y desarrollo, sino que la deben considerar una prioridad nacional".