Pondrán a autopista el nombre del rebelde sin causa
Inmortaliza EU a James Dean a 50 años de su muerte
Ampliar la imagen Al este del Ed�(1955), dirigida por Elia Kazan FOTO Tomada del libro el cine, Editorial Larousse Foto: Tomada del libro el cine, Editorial Larousse
Ampliar la imagen Uno de los �os h�es de Hollywood FOTO Tomada del libro 150 Years of Photo Journalism Foto: Tomada del libro 150 Years of Photo Journalism
A 50 años de su trágica muerte James Dean, el ídolo no fraguado en vida del Hollywood de hace medio siglo será ampliamente recordado por los medios estadunidenses.
La imposición de su nombre a una importante autopista de California, la transmisión de especiales por la cadenas televisivas, la venta de memorabilia, y el establecimiento de un sitio de Internet, forman parte de los homenajes al protagonista de cintas como Gigante y Rebelde sin causa.
Dean, quien nació en Indiana, falleció el 30 de septiembre de 1955, a los 24 años de edad, cuando estrelló su pequeño auto deportivo en una carretera de Cholame, California. Su muerte enlutó a millones de ardientes quinceañeras en todo el mundo, quienes soñaban con el muchacho desparpajado y de aspecto frío e indiferente.
El sitio exacto donde ocurrió su accidente aún es venerado por cientos de miles de personas de todas las edades, y es el segundo sitio público del estado en llevar el nombre de un actor.
Además de las dos cintas mencionadas Dean filmó Al este del paraíso, basada parcialmente en una novela de John Steinbeck, pero su caracterización de "rebelde sin causa" revolucionó el concepto de jóvenes para el establishment al interpretar un personaje inconforme.
Dean, de origen rural, pues nació en un rancho en Morgan, empezó su carrera teatral cuando aún era estudiante de artes dramáticas. Las tablas de un teatro fueron el primer escenario en su carrera, la cual se extendió a los estudios de televisión, cuando por el aún tierno medio se transmitían obras teatrales auspiciadas por empresas como la General Electric o la US Steel.
Era activo en la música -tocaba el violín con fluidez- y en los deportes, como reconoció en su autobiografía, un ensayo escolar que le entregó al director de la Preparatoria Fairmont, Roland Dubois. Dean se aficionó al motociclismo cuando tuvo edad para obtener su licencia de conducir, y hasta compitió en algunas carreras. Al momento de su accidente formaba parte del elenco de una obra en Broadway, The Inmoralist.
Apenas un par de años después de su fallecimiento, la figura de Dean tomó categoría de culto, cuando se llevó a la pantalla La historia de James Dean.