Compartir y colaborar, nuestra intención, sostiene
No buscamos el todo o nada sino el consenso: Carlos Slim
Cabeza visible del Acuerdo Nacional para la Unidad, el Estado de Derecho, el Desarrollo, la Inversión y el Empleo, Carlos Slim defendió su propuesta al advertir que en el actual estado de cosas en el país ''no hay que buscar el todo o nada sino el consenso'', porque ''si no avanzamos nos rezagamos''.
Su poder de convocatoria casi igualó al económico; fue tan grande que el empresario más acaudalado de América Latina planteó en el documento lo que ha sido su visión de país, y lo que se requiere para impulsar el desarrollo sostenido. Casi casi lo que debería ser una política de Estado.
Las suspicacias que despertó el acuerdo fueron atajadas por su impulsor, una a una, durante una larga conferencia de prensa al final de la presentación del documento que, dijo, ''no es una carta a Santa Claus, pero que sí le dice qué queremos, dónde comprarlo, cómo hacerlo y cómo hacerle''.
Las preguntas del por qué, cómo y cuándo se sucedían una tras otra. El empresario respondía: es un acuerdo que busca el consenso, sumar esfuerzos, ''no somos gestores''; tampoco ''se trata de ejercer presión o jalar orejas; no somos la liga de la decencia; no se trata de amarrar las manos a nadie, sino de compartir y colaborar''. O sea, ''nos estamos poniendo de acuerdo, incorporando cada vez más a los actores políticos''.
Al preguntarle si el acuerdo representaba un documento reprobatorio de este y anteriores gobiernos que no pudieron impulsar el desarrollo del país, el empresario respondió: ''No es reprobatorio, está viendo pa´delante, no está viendo pa´tras. No somos calificadores de eficacia, de competitividad ni nada. Estamos proponiendo objetivos y formas de alcanzarlos producto del enriquecimiento de un documento en el que colaboraron muchos, incluidos políticos''.
Muchos comunicadores preguntaron sobre la ausencia de políticos. Ellos, precisó Carlos Slim Helú, se incorporarán más adelante. El documento, dijo, contiene propuestas que implican reformas y se busca que éstas se hagan lo más rápido, ''aunque no son para mañana. Si en un año electoral como éste algún candidato las toma, ya es un avance''.
El secretario de Gobernación, Carlos Abascal, asistió como testigo de honor en representación del presidente Vicente Fox. Slim explicó: ''El Presidente no pudo venir porque anda de viaje, pero él iba a ser el testigo de honor. Está consciente (Fox) del acuerdo. En el Ejecutivo participaron en el mismo, lo conocen, aportaron varios conceptos y están de acuerdo con él. No es a espaldas del gobierno''.
Añadió: ''Este acuerdo es plural, contempla la diversidad democrática, el medio ambiente, los derechos humanos, y al mismo tiempo trata de no ser excluyente. Lo que queremos es hacer un esfuerzo para que una vez terminadas las luchas internas de los partidos políticos, las campañas de los candidatos sean de propuestas, no de descalificaciones''.
Hubo una pregunta que trató de comprometer al empresario en el sentido de que el pacto pudiera ser un elemento de presión al actual gobierno. Slim aclaró: "No se trata de ejercer presión o jalar orejas, sino realmente ofrecer un proceso de colaboración. A ver si trabajando juntos podemos disminuir todos estos vapores políticos que a veces, en el corto plazo, impiden que se tomen decisiones. Y para darle seguimiento, pues sucede que los medios son un factor muy importante para ver si efectivamente están mejorando las cosas; ustedes hacen análisis muy buenos, pues también podemos colaborar con ustedes para que las medidas que se tomen sean las más atinadas''.
Entre los reporteros que asistieron a cubrir el acto ya se comenzaba a bautizar el suceso como el ''Pacto del Castillo de Chapultepec''. Por eso, al final, se le preguntó sobre la simbología que implicaba haber escogido el alcázar. Respondió: ''Platicamos dónde hacerlo, dónde cabíamos. Primero, en el Museo de Antropología, y estaba ocupado. Buscamos el Auditorio Nacional, y también estaba ocupado; estuvimos buscando otro lugar y como alguien comentó que éramos un grupo muy plural, pues había que buscar un sitio importante, trascendente. No otro que no tuviera un significado y que no se hiciera en una institución privada; un lugar que pudiera ser conflictivo desde el punto de vista de los que fueran a asistir al lugar''. Entre risas completó: ''De hecho se iba a hacer abajo (en la planta baja del Castillo), pero como está abierto el museo y está con mucha actividad, no era viable hacerlo''.
Poco antes de retirarse, Abascal Carranza aceptó contestar algunas preguntas de los reporteros. A una de ellas respondió que en este gobierno todavía hay tiempo para avanzar en varios de los temas planteados como parte del ''Pacto del Castillo de Chapultepec''.