Asegura Arturo Montiel que está mediando una solución entre la maestra y Madrazo
Existen las condiciones para una alianza PAN-Gordillo, estima Garrido Patrón
Las condiciones están dadas para que el Partido Acción Nacional (PAN) concrete una alianza con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y su presidenta, Elba Esther Gordillo, comentó hoy el gobernador de Querétaro, Francisco Garrido Patrón.
Consideró que no es "asunto extraño" que el PAN realice alianzas políticas, al recordar la coalición que el blanquiazul formó con el Partido Verde Ecologista de México en 2000, cuando Vicente Fox ganó la Presidencia de la República.
"Las alianzas son viables en la política" y el PAN no tiene "ningún inconveniente estatutario en una alianza de esta naturaleza", expresó en conferencia de prensa en la capital queretana.
"Prácticamente todas (las alianzas), no hay una que no sea viable, el chiste es que las condiciones se den y será una circunstancia que tendrá que valorar el propio Partido Acción Nacional, la propia Elba Esther si se diera esta posibilidad, Acción Nacional no tiene ningún inconveniente estatutario en una alianza de esta naturaleza; simplemente habrá que ver coyunturalmente si es conveniente o no", comentó.
En un acto por separado, en la capital del país, el dirigente del Partido del Trabajo (PT), Alberto Anaya, afirmó que la lideresa del SNTE, Elba Esther Gordillo, se presenta como "una perdedora" dentro del PRI. A pregunta expresa de si la priísta tendría cabida en el frente amplio de las fuerzas de izquierda, el petista señaló que ese proyecto tiene "otro terreno de desarrollo y va más dirigido a las fuerzas de la centroizquierda".
También destacó que la educación tiene que estar al margen de la camisa de fuerza que representan las prebendas sindicales ("las cuales encabeza Gordillo") porque estos condicionamientos son los que más daño han hecho a este sector.
Entrevistado al término de la presentación del Premio Internacional Asia Pacífico en la Secretaría de Educación Pública, Anaya reiteró que los esfuerzos del frente opositor se dirigirán en todo momento a obtener una candidatura de unidad, porque es una condición básica para lograr la victoria en las elecciones de 2006.
Manifestó que si bien las personalidades más destacadas para encabezar el frente son Andrés Manuel López Obrador y Cuauhtémoc Cárdenas, "la capacidad de propuesta sigue abierta".
El conflicto terminó: Montiel
Asimismo, el precandidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Arturo Montiel Rojas dio por concluido el conflicto interno por la dirigencia priísta y señaló que no hay un rompimiento con el SNTE, porque se trata simplemente de un problema entre dos personas: Roberto Madrazo y Elba Esther Gordillo, el cual cuando "los dos cuando se sienten, lo van a arreglar".
En su gira por Monterrey, Nuevo León, rechazó que se hable de la expulsión o suspensión de derechos de Elba Esther Gordillo, porque "la maestra es una dirigente que obviamente suma en el partido, y creo que en el PRI no estamos en este momento para restar, sino para sumar".
Agregó que Madrazo Pintado y Gordillo Morales le han permitido servir como mediador, "yo los convoco, nos reunimos por horas para limar las asperezas que hay, encontrar una solución, creo que se ha ido caminando, y veremos en los próximos días qué determinación se toma".
Por otra parte, Francisco Rojas Gutiérrez, diputado del PRI, avaló como cierta la versión de Elba Esther Gordillo Morales de que fue en casa del ex presidente Carlos Salinas donde se negoció la reforma fiscal a fines de 2003.
Rojas Gutiérrez, quien en aquel entonces se desempeñaba como presidente de la Comisión de Presupuesto de San Lázaro, confirmó la asistencia del secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, al cónclave, y con su acostumbrado tono evasivo asumió: "a mí no me afecta nada... no hice absolutamente nada mal, al contrario, me siento muy tranquilo, muy orgulloso de participar en algo que va en beneficio del país".
Mariana Chávez, David Carrizales y Miroslava Breach Velducea, corresponsales; Karina Avilés y Roberto Garduño, reporteros