Cambiaría otras; dice que no merece importancia el desdén de Marcos por el diálogo
Felipe Calderón afirma que mantendría muchas cosas buenas del gobierno foxista
Tras declararse "político de centro", comprometido con la causas sociales, Felipe Calderón Hinojosa, precandidato del Partido Acción Nacional (PAN) a la Presidencia, aseguró que el gobierno foxista ha tenido éxito en la lucha contra la pobreza, por lo que él seguiría "muchas cosas buenas" de esta administración, mientras en otras será necesario rectificar y en unas más habrá que profundizar.
De la ubicación personal en la geografía política también afirmó estar confiado en "poder sumar a los compañeros y amigos dentro del PAN que puedan estar hacia la derecha o más a la derecha de lo que nosotros estamos". Y apenas poco antes se había declarado de centro.
Durante su acostumbrada conferencia de prensa de los lunes en la ciudad de México se le pidió su opinión sobre el anuncio del subcomandante Marcos de que el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) emprenderá en 2006 una campaña por todo el país.
Su respuesta fue una crítica severa al dirigente zapatista, a quien acusó de incurrir en constante "desprecio", "desdén", "arrogancia", "desaire" y "soberbia", al cerrarse al diálogo con el comisionado para la paz Luis H. Alvarez.
Esa actitud se agrava aún más, remarcó, pues con ella Marcos ha cerrado también las opciones de desarrollo y mejores oportunidades para las comunidades indígenas, pues es bien sabido que el EZLN ha prohibido a sus comunidades aceptar la ayuda gubernamental. "Don Luis (H. Alvarez) los ha buscado hasta el cansancio, diría yo, y eso me consta."
Respecto al deslinde que ahora hace Santiago Creel del gobierno foxista del que formó parte, Calderón expresó que la experiencia de esta administración será útil para innovar en algunos rubros, y rectificar y profundizar en otros.
Aseveró entonces que en América sólo dos naciones han tenido éxito en el combate a la pobreza: Chile y, "aunque no les guste a muchos", México, que durante este gobierno pudo reducir la pobreza extrema en una cuarta parte, "aunque a este ritmo va tardar en resolverse el problema de pobreza en Chiapas".
Abundó: "estaré dispuesto como presidente a dialogar con cualquier mexicano que en términos legales quiera dialogar con el presidente; sin embargo, tampoco quiero ser ingenuo, me parece que el protagonismo de Marcos, el desplante y el desdén con que ha asumido el tema del diálogo, me parece que no amerita que se le dé una importancia que, honestamente, no se debe dar a esos desprecios".