Logran incremento de 42% en salario y prestaciones y un bono único de $7 mil 250

Trabajadores mineros reinician este sábado labores en Sicartsa y ATIBSA

La propuesta fue presentada por Grupo Villacero el jueves y aceptada unánimemente por los huelguistas

Pendiente, la sindicación en Asesoría Técnica Industrial del Balsas

PATRICIA MUÑOZ RIOS

Luego de 46 días de huelga, el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana y representantes de la empresa Siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas llegaron a un acuerdo para concluir el paro, que contempla un incremento salarial de 8 por ciento para los 2 mil 400 trabajadores de esta sección (271), 34 por ciento en prestaciones y un bono único por 7 mil 250 pesos.

De esta forma, la huelga iniciada el primero de agosto pasado en Sicartsa concluyó luego de diversas diferencias y descalificaciones entre las partes, que propició una amplia movilización de los mineros y motivó la intervención de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).

Sorpresivamente, el miércoles pasado la empresa propuso este nuevo paquete de acuerdo, que fue votado en las primeras horas del jueves 15 de septiembre en la sección 271 de Lázaro Cárdenas, Michoacán, y aprobado unámimemente, por lo que los trabajadores sindicalizados acordaron levantar la huelga y aceptar el aumento a salario y prestaciones propuestos, lo que significa un ajuste global del 42 por ciento a las percepciones.

Visita a la planta de Apodaca

De forma inmediata fueron entregadas las instalaciones a las empresas Sicartsa y Asesoría Técnica Industrial del Balsas (ATIBSA), del Grupo Villacero, y ambas partes determinaron reiniciar labores en el primer turno de este sábado 17.

El sindicato minero informó que esta organización y el Grupo Villacero acordaron realizar una visita de inspección a la planta de Apodaca, en la que participarán dos comisionados por cada parte, además de representantes de la STPS, el Colegio de Ingenieros Industriales del Nuevo León, el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey y la Universidad Autónoma de Nuevo León.

El objetivo es determinar en forma conjunta la posible "sindicación" de los trabajadores de la planta ATIBSA, que fue uno de los puntos centrales que llevaron a la huelga.

El acuerdo final lo tomarán las "instituciones de educación superior", quienes elaborarán un dictamen en materia del ramo industrial y siderúrgico para determinar si procede que este sindicato sea beneficiado con el contrato colectivo de la empresa.

En cuanto a los salarios caídos, estos se pagarán al 50 por ciento; además, el Grupo Villacero aceptó cubrir 50 por ciento del premio por asistencia y el mismo porcentaje del bono de ayuda para despensa por el tiempo que duró el paro.

En el acuerdo final se explica que la empresa se comprometió también a retirar cualquier "demanda presentada o acción hostil que pueda existir en contra de la dirigencia nacional y local o de los trabajadores" de Sicartsa o ATIBSA.

El sindicato precisó que las prestaciones que se revisan son el aumento de 300 por ciento en el renglón del seguro de vida, el incremento de los porcentajes del fondo de ahorro, prima vacacional y dominical, así como los montos de aguinaldo, gastos funerarios, indemnización, previsión social, compensación por accidente de trabajo y becas.

En el acuerdo se establece además un incremento al bono de productividad de 1 a 2 por ciento del salario tabulado por cada mil toneladas de palanquilla embarcada cada semana, y se otorgará el bono de producto terminado que opera en la empresa.

En respuesta a las violaciones del contrato colectivo de trabajo, los sindicalizados lograron que la empresa aceptara entregar los resultados de los exámenes médicos que les practica; la verificación y compostura de las unidades de transporte de personal; un arreglo económico para los siete trabajadores de Viga Trefilados, y convino cubrir las vacantes de ATIBSA y otra firma anexa, denominada Administración de Servicios Sideúrgicos.

Martín Rodríguez Piedra, secretario general local de la sección 271 de este sindicato, fue el encargado de informar los resultados de la asamblea del jueves 15 de septiembre.

Dijo que este gremio "no se intimida ni se deja presionar por nada y por nadie", ya que su dirigencia -encabezada por Napoleón Gómez Urrutia- pudo demostrar la legalidad de la huelga, y tras una ardua lucha laboral, los trabajadores de esta sección lograron entregar una de las mejores revisiones de todo el sector minero.