Los complejos petroquímicos requerirán inversión por mil 600 millones de dólares
Anuncia Fox construcción del proyecto Fénix en Coatzacoalcos y Altamira
En la extensión del Informe de gobierno en Morelia ofrece disciplina para evitar crisis
Morelia, Mich., 2 de septiembre. El presidente Vicente Fox anunció la decisión de construir el proyecto Fénix de petroquímica en Coatzacoalcos, Veracruz y en Altamira, Tamaulipas. Este gran complejo al que originalmente se calcula una inversión de 2 mil 600 millones de dólares está diseñado para producir materias primas como propileno, etileno y otros derivados del petróleo.
Se estima que hoy cuando acuda al puerto de Veracruz en el cuarto punto de las ceremonias regionales para difundir su Informe de gobierno, el jefe del Ejecutivo aporte más detalles sobre esta determinación, la cual fue presentada originalmente en noviembre de 2003. En octubre de 2004 se anunciaron las empresas privadas que podrían asociarse con Pemex para impulsar el proyecto Fénix el cual estaría integrado por dos complejos. El primero con capacidad para producir un millón de toneladas de etileno anuales y 1.9 millones de toneladas de otros derivados con una inversión de 800 millones de dólares.
El segundo para la elaboración de aromáticos, requeriría, según información difundida por Pemex de 800 millones de dólares para la producción de un millón de toneladas para petroquímicos.
El mandatario cerró en Morelia el primer día de sus presentaciones en provincia de su quinto Informe de gobierno, los cuales a diferencia de su presentación en San Lázaro el pasado jueves fueron pródigos en datos y compromisos concretos. Entre ellos marcó los tres grandes compromisos para el cierre de su administración en 2006: fortalecer a las instituciones electorales para sacar adelante su tarea y garantizar el respeto al voto; garantizar estabilidad y disciplina económica para evitar al país "de manera contundente cualquier repetición de crisis financiera, quebrantos o devaluaciones".
Y el tercero ofreció Fox aquí no tener "año de Hidalgo", es decir corrupción al concluir su gobierno.
Se comprometió además a evitar la reducción en el ritmo de crecimiento del país, éste "no tiene por qué afectarse" porque México atraviese un acto democrático en una "elección federal presidencial" (sic).
Durante una ceremonia a la que asistieron sobre todo militantes del PAN de Morelia, actualmente gobernando el municipio, Fox Quesada insistió en que en el 2000 los mexicanos "con determinación y valor nos decidimos poner fin a un sistema político que cayó en niveles grandes de corrupción e ineficacia".
Según su mensaje jamás en la historia mexicana se había actuado con tanta energía a través de una estrategia integral para combatir a la pobreza, ni destinado tantos recursos hacia ese fin. La democracia, admitió, no será plena, y sí será débil mientras haya quien viva en condiciones de pobreza y marginación.
En la ceremonia y en franco contraste con el contenido del discurso leído horas antes en Guadalajara por el gobernador de Jalisco Francisco Ramírez Acuña, el anfitrión local, Lázaro Cárdenas, leyó un texto mucho más breve donde destacó la necesidad de consolidar la democracia electoral porque esta enfrenta amenazas como el peso excesivo del dinero en las campañas y precampañas.
Queda mucho por hacer en México, resaltó el gobernador michoacano, para un ejercicio a cabalidad de la independencia y soberanía nacionales. Hoy debe pasarse de la sana alternancia de fuerzas políticas en el poder a la construcción de un nuevo régimen que favorezca acuerdos y fortalezca la gobernabilidad democrática.
A su vez el presidente Fox anunció la próxima publicación, en el Diario Oficial de un decreto para conceder estímulos y exenciones fiscales para rescatar las zonas de monumentos históricos de Morelia, Mérida y el puerto de Veracruz.