Impedir el desalojo hasta que se celebren comicios anticipados, plan de colonos
Manifestación de más de 100 mil opositores a la retirada israelí de la franja de Gaza
Ampliar la imagen Opositores al desalojo repudian en la plaza Yitzhak Rabin de Tel Aviv la retirada de Israel FOTO Ap Foto: Ap
Tel Aviv, 11 de agosto. Más de 100 mil opositores a la retirada de la franja de Gaza realizaron esta noche una gran protesta en Tel Aviv, en la plaza que lleva el nombre de Yitzhak Rabin, ex primer ministro que fue asesinado por un extremista en 1995 y apostaba por frenar la colonización israelí.
Pinchas Wallerstein, representante de los colonos, dijo a la radio israelí que el objetivo de la protesta es impedir el desalojo hasta que se celebren elecciones anticipadas.
Con el lema "Juro fidelidad a las implantaciones", los manifestantes llegaron a la plaza vestidos de naranja, color que indica el desacuerdo con el plan de retirada, procedentes de distintos puntos de Cisjordania y la franja de Gaza, para dar la última batalla.
Yesha, la principal organización de colonos de Gaza y Cisjordania, instó a los manifestantes a llegar en grandes convoyes al cruce de Kissufin para "evitar el acceso de las fuerzas de desalojo", y después encabezar la entrada hacia Gush Katif, el mayor bloque de colonias de la franja de Gaza.
Para impedirlo, el ejército israelí limitó desde hoy el acceso sólo a sus habitantes, las fuerzas de seguridad y quienes entreguen mercancías de primera necesidad o ayuden a colonos a mudarse de sus casas.
Sin embargo, el diario Haartez dijo que el ejército admitió que el número de personas que ha logrado infiltrarse es mayor al que había dicho en un principio, unas 2 mil 700, que intentan enfrentar a los soldados que desalojarán a más de 8 mil colonos.
Para el ministro de Defensa, Shaul Mofaz, las colonias pueden ser evacuadas antes de lo previsto, en unos dos días, pues la mayoría de sus habitantes entendieron que deben abandonar sus casas sin esperar a ser desalojados por la fuerza.
El teniente coronel Adir Haruvi explicó que la mañana del lunes 400 equipos formados por cuatro soldados cada uno irán casa por casa para entregar a los residentes una carta en que se ofrecerá ayuda para mudarse voluntariamente y se les informará que tienen 48 horas para dejar el lugar.
Hasta el 17 de agosto, la evacuación de los colonos repartidos en 21 asentamientos de la franja de Gaza se hará de forma pacífica y los soldados se limitarán a ayudarlos. Después, "las fuerzas del orden obligarán a cumplir la ley a aquellos que decidan quedarse", subraya comunicado del ejército.
Pero Tel Aviv no sólo se enfrenta a la resistencia de muchos colonos a abandonar sus hogares y a los ultranacionalistas, sino a algunos soldados, y este día un militar fue arrestado por manifestar que quiere matar al primer ministro Ariel Sharon.
A su vez, Jihad Islámica anunció su intención de continuar la lucha contra Israel, inclusive después del retiro de Gaza, hasta que ponga fin a la ocupación de todos los territorios palestinos, dijo uno de sus líderes, Mohammed Hindi.
El plan de retirada también incluye el desalojo de cuatro colonias menores de Cisjordania, pero Sharon se negó hoy a hacer concesiones sobre los grandes bloques, la situación de Jerusalén este y los refugiados palestinos, lo que fue denunciado por el presidente palestino, Mahmoud Abbas.
"Rechazamos esas declaraciones. Nadie tiene derecho a descartar esos temas que deben ser negociados", dijo Abbas, y señaló que esos asuntos deben ser resuelto con base en las resoluciones internacionales, como el mapa de ruta.
"Los bloques de colonización seguirán existiendo, serán unidos territorialmente al Estado de Israel; no voy a negociar en ningún caso sobre Jerusalén, así como tampoco habrá regreso de los refugiados palestinos de 1948 a Israel", afirmó Sharon.
Mientras, Abbas ordenó a los servicios de seguridad que protejan a los extranjeros que viven en los territorios palestinos, tras el secuestro, el lunes, en la franja de Gaza de tres empleados de la Agencia de la Organización de Naciones Unidas para la Ayuda de los Refugiados Palestinos, que poco después fueron rescatados.
En otro asunto, un tribunal militar israelí condenó a ocho años de prisión al soldado Taysir Wahid por el homicidio involuntario del pacifista británico Tom Hurndall, de 22 años, en abril de 2003 en el campo de refugiados de Rafah, franja de Gaza.