"Inaceptable e ilegal", la demanda del Consejo de Gobernadores, afirma Teherán
Suspender la producción de combustible nuclear, pide por consenso la AIEA a Irán
La resolución fue adoptada bajo presión de EU y sus aliados, acusa la república islámica
Ampliar la imagen El subdirector general de la AIEA y jefe de inspectores de armas de la ONU, Olli Heinonen (izquierda), dialoga en el Centro Internacional de Viena con el jefe de la delegaci�ran�Cyrus Nasseri FOTO Ap Foto: Ap
Viena, 11 de agosto. La Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) adoptó este jueves por consenso una resolución que pide a Irán la suspensión de la producción de combustible nuclear, pero la república islámica, sin romper lazos, se negó a ceder al señalar que es "inaceptable e ilegal".
La resolución fue aprobada por los 35 países miembros del Consejo de Gobernadores, la instancia ejecutiva de la AIEA, después de tres días de arduas negociaciones y aplazamientos.
"Para promover la confianza, el Consejo de Gobernadores considera necesario que Irán suspenda todas las actividades vinculadas con el enriquecimiento de uranio y expresa su profunda preocupación" por el hecho de que haya decidido reanudar el proceso, según el texto de la resolución.
El director general de la AIEA, Mohamed el Baradei, prevé presentar el 3 de septiembre un nuevo informe en Viena sobre este polémico caso, que incluirá la respuesta iraní a la resolución.
También anunció que una delegación del organismo dependiente de la Organización de Naciones Unidas (ONU) viajará a Irán este viernes.
Ante los periodistas, El Baradei se mostró optimista al decir "que hay una ventana abierta" al restablecimiento del diálogo de los iraníes con la troika de la Unión Europea, integrada por Alemania, Francia y Gran Bretaña, y dijo estar "muy animado por la posición de Teherán y los europeos, que afirman estar dispuestos a continuar la negociación".
No obstante, en una declaración en la capital austriaca, la delegación iraní fue contundente al proclamar su derecho a producir combustible dentro del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), aunque mantiene cerrada la central de enriquecimiento de uranio de Natanz.
"Irán no cederá y será productor de combustible nuclear de aquí a 10 años", aseguró el jefe de la delegación iraní en Viena, Cyrus Nasseri, al condenar la resolución. Añadió: "Teherán seguirá cooperando con la AIEA y mantendrá todas sus actividades" dando las garantías exigidas en materia de no proliferación.
Más tarde, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores iraní, Reza Asefi, citado por la agencia oficial Irna, dijo que la resolución "fue adoptada bajo presión de Estados Unidos y sus aliados, carece de base jurídica, de lógica y es inaceptable".
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, declaró este jueves que la decisión de la AIEA es un "primer paso positivo y se emitió un informe que expresó serias dudas sobre las decisiones iraníes".
El jefe de la Casa Blanca indicó que la estrategia estadunidense será trabajar con la troika europea "de forma que los iraníes escuchen una voz común sobre sus ambiciones de armas nucleares".
Estados Unidos, que acusa a Irán de querer dotarse de armas atómicas, defiende la opción del Consejo de Seguridad de la ONU para imponer posibles sanciones, pero esta posibilidad no fue mencionada en la resolución de este jueves.
En nombre de la troika europea, Philippe Thiébaud, representante de Francia, recalcó que siguen dispuestos a "proseguir las negociaciones", pero se mostró sorprendido por el hecho de que Irán reanudara la conversión cuando el programa nuclear de la república islámica"no tiene necesidad ni utilización posible de hexafluoruro de uranio (o gas UF6)", que puede ser creado durante ese proceso.