"O nos pagan o no seguimos laborando", advierten más de cien inconformes

Paran trabajadores de constructoras del aeropuerto por adeudos salariales

Aseguran autoridades del AICM que se han cubierto todos los contratos de las obras

TRIUNFO ELIZALDE

Más de cien trabajadores de siete constructoras encargadas de terminar la última parte de la nave principal del ambulatorio del área nacional del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), efectuaron ayer por varias horas un paro de labores en protesta porque las empresas -sobre todo ORI y Constructora R8- llevan varias semanas de no cubrir los salarios y sólo les dan "abonos de 100 pesos".

Desde las tres de la tarde, y hasta muy entrada la tarde, oficiales y obreros de la construcción, entre carpinteros, albañiles, herreros, electricistas, operadores de maquinaria pesada y de otras especialidades, suspendieron sus labores para obligar a las empresas contratadas por Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) y por la dirección general del AIMC, a pagarles las tres semanas que, afirman, se les adeuda.

Molestos, los trabajadores lanzaron acusaciones contra José Antonio Rangel, residente de obra de Constructora R8, quien llegó a las cuatro y media de la tarde para tratar de calmar los ánimos, pero fue recibido con palabras malsonantes, ya que consideran que es él quien está jineteando el dinero que recibe de ASA y del AICM.

De hecho, Rangel negó que se les adeuden dos semanas, pero los trabajadores le dijeron de frente: "Usted miente. Esta mañana le dejó a su hijo 4 mil pesos para que nos diera un abono de 30 o 40 pesos por cabeza". Los inconformes revelaron que sus salarios son en promedio de 2 mil 400 pesos semanales. "Cómo quiere que nos conformemos con esa limosna, cuando su obligación es pagarnos nuestro salario completo". Y advirtieron: "o nos pagan o no seguimos trabajando y a ver qué hacen con su obra".

Es de señalar que el sobrestante Raúl Campos, quien se había refugiado en su lugar de trabajo y no quería dar la cara a los obreros y oficiales, tuvo que hacerlo cuando llegó Rangel, quien dijo: "ya recibí un cheque por 70 mil pesos para pagarles mañana a los muchachos todo lo que se les debe... ahorita no puedo hacerlo porque no se ha depositado y no hay banco donde cobrarlo".

Todo era por demás. Los oficiales y maestros de obra, junto con empleados de oficinas de las siete compañías que llevan a cabo el remozamiento de la última parte de la nave del ambulatorio principal del área nacional del aeropuerto capitalino, exigieron que se les liquidara de inmediato o no seguirían laborando.

Los inconformes permanecían cerca y otros rodeando a los periodistas y encargados de la construcción, pero nadie trabajaba. El paro era total.

Ante la posibilidad de que estuviera en riesgo la conclusión de las obras de ampliación del aeropuerto de la capital, la cual figura entre los trabajos que inaugurará la última semana de este mes el presidente Vicente Fox, a las cinco y media de la tarde se presentó Héctor Velázquez Corona, director general del AIMC -según informó vía telefónica José Luis Uribe, gerente de Comunicación Social-, "para llamar la atención a las empresas subcontratadas por ORI y Constructora R8".

Según el vocero del aeropuerto internacional, Velázquez Corona les dijo a los contratistas que "es injusto que no se les pague a los trabajadores puntualmente sus salarios, sobre todo cuando nosotros les cubrimos a ustedes todos los contratos por las obras que se realizan". Por lo que exigió que los salarios fueran cubiertos de inmediato a los trabajadores "esta misma tarde".

El AICM, señaló José Luis Uribe, no le debe nada a ninguna empresa, aunque dijo desconocer si Aeropuertos y Servicios Auxiliares adeuda algún dinero a las empresas subcontratadas.