Califica Teherán de insulto la petición de que renuncie a sus "derechos nucleares"
Negociará, pero sin condiciones previas, advierte Irán a la UE
Los europeos "nos tratan como en el siglo pasado, cuando dominaban nuestro país": Ahmadinejad
Amenaza Bush con recurrir a Naciones Unidas en busca de "una solución" con la nación islámica
Ampliar la imagen El ministro de Defensa iran�Al�hamjani, advierte a Occidente contra un posible ataque a instalaciones at�as FOTO Reuters Foto: Reuters
Viena, 9 de agosto. Irán anunció que acepta continuar sus negociaciones en materia nuclear con la Unión Europea (UE) si no impone condiciones previas, pero calificó de "insulto al pueblo iraní" el pedido de que renuncie a sus derechos, mientras la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) informó que hoy retirará los precintos de la planta de Isfahan.
El negociador Cyrus Nasseri indicó que las autoridades iraníes están "dispuestas a proseguir las negociaciones con la troika de la UE", formada por Alemania, Gran Bretaña y Francia, "si no hay condiciones previas" y si se desarrollan en un clima de "buena fe".
Nasseri hizo estas declaraciones en Viena, después de la suspensión de la reunión del consejo de gobernadores de la AIEA, convocada por la UE para examinar la reanudación de actividades de conversión de uranio en Irán.
Esta reunión se reanudará la tarde de este miércoles, siempre que los 35 países miembros lleguen a acuerdo sobre un texto apropiado sobre el caso iraní, afirmó la portavoz, Melissa Fleming.
No se trata por ahora de recurrir al Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para que adopte sanciones internacionales, como exige Estados Unidos, agregó la portavoz.
El nuevo presidente iraní, el ultraconservador Mahmoud Ahmadinejad, aseveró este martes que la oferta de cooperación hecha el pasado viernes por los europeos es "un insulto al pueblo iraní".
"Los europeos hablan como si el pueblo iraní fuese atrasado, como si estuviéramos en el siglo pasado cuando ellos dominaban nuestro país", señaló durante una conversación telefónica con Kofi Annan, secretario general de la ONU, según la agencia Isna.
Ahmadinejad dijo que endurecerá su política, pero subrayó que quiere continuar las negociaciones con la UE en otros términos.
Aseguró que la reapertura parcial de la planta de Isfahan (en el centro del país) se realiza en conformidad con los derechos de Irán como miembro de la AIEA y país signatario del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).
El presidente prometió a Annan que Teherán respetará la Carta de la ONU y todas las regulaciones internacionales, aunque, puntualizó, también tiene que luchar por los derechos legítimos de su país.
Dos años de negociaciones y "las acciones de Irán han aumentado las expectativas ilegítimas de los europeos que quieren pisotear los derechos innegables de los iraníes", agregó.
Por su parte, el ministro de Defensa iraní, Alí Chamjani, indicó: "¿Debemos acaso aceptar la humillación, las sanciones de los demás, incluso sancionarnos a nosotros mismos, o más bien resistir? Creo que debemos resistir".
Además, consideró "probable" que el asunto termine ante el Consejo de Seguridad: "¿Qué van a hacer, imponernos sanciones? Ya estamos sometidos a sanciones". Y advirtió: "Si un día las instalaciones nucleares iraníes son atacadas, dejaremos de lado nuestros compromisos atómicos".
En Isfahan continuaba el proceso para poner en funcionamiento la central nuclear de conversión de uranio, y los precintos colocados deberán ser quitados en las próximas horas, declaró Mohamad Saidi, responsable iraní.
Los inspectores de la AIEA "terminaron hoy de instalar cámaras de vigilancia" en la fábrica y esta entidad de la ONU "nos prometió que los precintos serán quitados de aquí al miércoles, a mediodía", declaró Saidi.
Los países occidentales estiman que estas actividades traen consigo un riesgo de proliferación ya que producen combustible para las centrales civiles, pero también pueden servir a fines militares.
Irán alega su "derecho a desarrollar actividades nucleares pacíficas" según estipula el TNP, y afirma haber rechazado propuestas de cooperación nuclear, comercial y política hechas por la UE, porque descartan este derecho.
Escepticismo de la Casa Blanca
El presidente George W. Bush indicó hoy que es signo positivo la intención de Irán de retornar a las negociaciones, pero se manifestó escéptico y dijo que Teherán tiene el propósito de desarrollar armas nucleares, e indicó que su país podría recurrir a la ONU en busca de "una solución".
"Es importante que los iraníes comprendan que Estados Unidos se mantiene firme junto a los tres países europeos, que Irán debe conformarse con los compromisos asumidos en el acuerdo de París y que vamos a trabajar con nuestros aliados para definir respuestas si (Irán) ignora las demandas" que les son formuladas, afirmó Bush.
A su vez, Rusia aconsejó a Irán que suspenda "inmediatamente" la conversión de uranio, según un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso.
Por otro lado, Corea del Norte está satisfecha con las últimas negociaciones multilaterales sobre su programa nuclear, pero exigió a Estados Unidos cambiar su posición en la materia, declaró hoy el viceministro norcoreano de Relaciones Exteriores, Kim Yong-il.
Citado por la agencia China Nueva, Kim afirmó que su país "mantiene invariable" la reivindicación de que le sea reconocido el derecho de realizar actividades nucleares pacíficas.
Pyongyang expresó satisfacción por las pláticas en Pekín, pero hizo hincapié en que "ahora todo depende de Washington, que debe cambiar de política".
Las negociaciones de las dos Coreas con Estados Unidos, China, Rusia y Japón comenzaron en agosto de 2003 con el propósito de que Pyongyang renuncie a sus aspiraciones atómicas. La primera fase de la cuarta ronda concluyó sin resultados el domingo en Pekín, pero las partes volverán a reunirse a finales de mes.