Urgen 5.4 millones de dólares para la producción; prosigue la violencia: 20 muertos
En riesgo, el suministro iraquí de granos, alerta la FAO
Ampliar la imagen Los cacheos de la polic�se mantuvieron pese a la tormenta de arena de ayer en Bagdad
Roma, 8 de agosto. La guerra de Irak destruyó la industria de grano del país y ha puesto en riesgo el suministro de alimento básico en la región, por lo que serían necesarios 5.4 millones de dólares para reconstruirla, declaró este lunes la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) aseguró que Irak sólo puede cubrir 4 por ciento de su demanda de granos de calidad con sus propias reservas.
La industria de grano controlada por el Estado antes de 2003 era relativamente estable; sin embargo, el director del proyecto de la FAO para Irak, Tekeste Tekie, dijo que este país no tiene ningún sistema que provea grano de variedades mejoradas de alta calidad. "Si no se toman acciones inmediatas, se puede esperar una gran escasez de granos en un futuro cercano, amenazando la seguridad de alimentos del país", advirtió.
En tanto, y en medio de una oleada de violencia en varios puntos de Irak, una fuerte tormenta de arena que paralizó Bagdad obligó a líderes iraquíes a retrasar las conversaciones para sacar adelante el borrador de la Constitución del país, que debe estar listo el 15 de agosto.
Por lo pronto, el jefe del Comité de Redacción de la Constitución, el jeque Humam Hammudi, dio plazo hasta el 12 de agosto a los líderes políticos para que solucionen las cuestiones pendientes. En caso contrario, el Parlamento se encargará del asunto y el proyecto de Constitución será debatido a mediados de agosto y luego adoptado para la celebración de un referéndum a mediados de octubre.
Al continuar la presión de la resistencia contra la ocupación, al menos 20 personas perdieron la vida en múltiples incidentes armados. Siete civiles iraquíes fueron asesinados y otros 30 resultaron heridos, cuando sus automóviles fueron tiroteados anoche al circular por la carretera que une las ciudades de Latafiya y Mosayib, situadas a 40 y 60 kilómetros al sur de Bagdad.
Por otra parte, en Tikrit fueron hallados los cadáveres de cuatro policías iraquíes mientras un camionero turco y siete iraquíes, cuatro de ellos de las fuerzas de seguridad, murieron en el norte de Bagdad.
En el poblado sureño de Samawa, cientos de manifestantes se congregaron el domingo para protestar por los deficientes servicios y solicitar la renuncia del gobernador. En respuesta, la policía abrió fuego, y mató a dos personas e hirió a otras 40.