Al cierre del PREP el abanderado priísta alcanzó un millón 730 mil sufragios

Logra Enrique Peña la segunda votación más alta en la historia del Edomex

Sólo Emilio Chuayffet ha superado esa cifra, al captar la preferencia de 2 millones de electores en 1993

Rubén Mendoza obtuvo 24.72% y Yeidckol Polevnsky 24.09%

ALONSO URRUTIA E ISRAEL DAVILA ENVIADO Y CORRESPONSAL

Toluca, Mex. 4 de julio. Con la segunda votación más alta obtenida en la historia de la entidad, el candidato de la coalición integrada por PRI-PVEM, Enrique Peña Nieto, confirmó hoy su triunfo al cerrarse el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM). El abanderado de la Alianza por México alcanzó un millón 730 mil sufragios, que lo ubicaron por encima de sus competidores, Rubén Mendoza, de PAN-Convergencia, quien obtuvo 901 mil votos, y Yeidckol Polevnsky, que consiguió 876 mil sufragios.

La diferencia entre primero y segundo lugar fue de poco más de 830 mil sufragios, es decir, más que el padrón electoral de Nayarit. En la elección mexiquense Peña Nieto alcanzó 47.55 de la votación, Mendoza se quedó con 24.72 por ciento y Polevnsky con 24.09 por ciento.

Con estas cifras, Peña Nieto se ubicó detrás de Emilio Chuayffet Chemor, quien en los comicios de 1993 obtuvo 2 millones de sufragios en la disputa por la gubernatura de la entidad.

Entre tanto, el consejero presidente del IEEM, José Núñez Castañeda, volvió a mencionar el 58 por ciento de abstencionismo que se registró, destacando el hecho de que no es un fenómeno atribuible sólo al organismo electoral, ya que es un problema que involucra principalmente a los partidos políticos y a sus candidatos, quienes son los responsables de captar las simpatías entre el electorado mexiquense.

A pesar del porcentaje de votación, Núñez Castañeda desestimó que esto pudiera cuestionar la legalidad de la elección. "Los comicios fueron legales independientemente de los votantes".

-¿El hecho que Enrique Peña haya sido elegido sólo con el respaldo de 1.7 millones de votos de los 8.8 millones de empadronados no le resta legitimidad?

-No es lo mismo el problema de la legitimidad que de la legalidad. La legitimidad se logra en el ejercicio del poder. La legalidad es la forma como llegas al poder y esto es perfectamente legal. La votación no le resta legalidad a la elección.

La victoria de Peña Nieto fue como antaño: casi carro completo, toda vez que ganó por amplio margen 39 de los 45 distritos electorales de la entidad, y los seis que perdió fueron por escasa diferencia. Cabe destacar que en las zonas tradicionalmente priístas las diferencias en las votaciones se dispararon incluso hasta cerca de tres a uno, como los casos de Atlacomulco, Temoaya, El Oro, Jilotepec e Ixtlahuaca.

El PRI también se despegó del PRD en algunos distritos clave donde anteriormente la competencia era más cerrada: en esta ocasión en el distrito 31 de La Paz, el PRI-PVEM venció con un margen de más de 30 mil votos al sol azteca, una situación similar ocurrió en el distrito 40 de Ixtapaluca, donde el tricolor ganó por 16 mil votos.

La debacle de AN

El PAN, aliado con Convergencia, no pudo refrendar la hegemonía que desde 1996 mantenía en el poniente de la zona metropolitana, considerado el corredor azul, ya que en estos comicios sólo ganó uno de los dos distritos de Tlalnepantla, de donde es originario su candidato Rubén Mendoza. Además, cayó en los dos distritos de la capital mexiquense que gobierna desde el año 2000, pese a que el alcalde Armando Enríquez fue uno de sus principales operadores.

La debacle panista se acentuó con las derrotas en los distritos de Naucalpan, Atizapán de Zaragoza, Cuautitlán Izcalli, Villa del Carbón, Coacalco y Nicolás Romero. En el corredor azul, el tricolor le arrebató a Acción Nacional los distritos de Atizapán, Cuautitlán, uno de Tlalnepantla, los dos de Naucalpan, Coacalco, Izcalli y Huixquilucan.

En los distritos 29 y 30 de Naucalpan, donde gobierna Angélica Moya, simpatizante del ex precandidato a gobernador por el blanquiazul, José Luis Durán Reveles, la división panista fue evidente; en el 29 Mendoza Ayala perdió con diferencia de 16 mil votos, una situación similar ocurrió en el 30, donde 7 mil votos marcaron la diferencia.

Al respecto, el alcalde de Tlalnepantla, Ulises Ramírez Núñez, consideró que en la caída de su partido influyeron los "desaciertos" del gobierno del presidente Vicente Fox y la división del blanquiazul.

"El PAN está triste en el país; creo que muchos de los desaciertos que hemos tenido en el gobierno federal han influido en el ánimo del instituto político", dijo el edil, al destacar que ahí están los casos de Nayarit y Guerrero, donde el partido obtuvo 5 y 1 por ciento de las votaciones. Destacó que en la derrota de Acción Nacional en territorio mexiquense, fue meritorio que Mendoza Ayala quedara en segundo lugar con 25 por ciento de los votos, "eso fue una hombrada", comentó.

Por otro lado, Acción Nacional no pudo penetrar en la zonas populares del oriente del estado, como lo hizo en 2000, cuando desplazó del segundo lugar al PRI. Así, por ejemplo, en los distritos de los municipios de Chalco, Ixtapaluca, Texcoco, Amecameca, y en cuatro de los cinco que tiene Nezahualcóyotl, no logró ganar en una sola de las 3 mil 883 casillas instaladas en la región. Sólo consiguió cuatro en el distrito 24 de Neza.

En el caso de Ecatepec, de las mil 444 casillas de los cuatro distritos en disputa sólo ganó 31, en un ayuntamiento que hasta dos años era gobernado por un panista.

El PRD cofirma su bastión

En el caso del PRD, sólo triunfó en los cinco distritos de Nezahualcóyotl, confirmando así su único bastión en el estado, donde opera la corriente Movidig de los hermanos Bautista López, detractora de Yeidckol Polevnsky. Un hecho trascendente fue la derrota del sol azteca en el distrito 12 de Texcoco; en 1999 el PRD ganó esa circunscripción con una diferencia de casi 4 mil votos. Seis años después, el PRI recuperó la preferencia y derrotó a los perredistas con casi 13 mil sufragios de diferencia, lo cual indica que el tricolor se reposicionó en distritos claves tanto del PAN como del PRD. Asimismo, el Partido de la Revolución Democrática retrocedió en el sur del estado, donde perdió los distritos de Tejupilco y Santo Tomás, ganados en los comicios de 2003.

Al igual que la historia panista en el oriente del estado, el Partido de la Revolución Democrática reflejó su casi nula presencia en el valle de Toluca y el norte del estado. En los dos distritos de Toluca, además de Lerma, Zinacantepec, y Metepec, sólo pudo ganar una de las mil 488 casillas de la región. En el norte no sobrepasó los 10 puntos porcentuales ni triunfó en ninguna casilla, lo que confirmó la poca penetración perredista en zonas más allá del oriente de la ciudad.

Con información de Silvia Chávez y René Ramón, corresponsales